Tal y como avanzó Noudiari, los activistas de Extinction Rebellion Ibiza han llevado a cabo estos días una serie de acciones pacíficas en el puerto de Ibiza con las que pretenden que la población tome conciencia de la necesidad de una reducción urgente de emisiones de C02 para evitar una catástrofe climatológica.
Lo han hecho en este lugar en concreto y junto a megayates como el Lady Moura, de más de 100 metros de eslora y helipuerto propio, porque afirman que los multimillonarios dejan en Ibiza y en todo el planeta «una huella de carbono muy superior a la de cualquier persona normal«.
“Este 10% de la población mundial, debido a sus jets privados y megayates, genera casi el 50% de todas las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero. El 1% más rico del planeta emite el 50% de las emisiones de aviones”, afirman.
Pero, paradójicamente, “los que más contaminación emiten serán los que menos sufrirán las consecuencias de su estilo de vida, mientras que los que menos culpa tienen del calentamiento global son los que ya sufren sus efectos”, alertan.
Lamentan que en Ibiza se esté tratando con especial mimo a los turistas ricos “cuyo estilo de vida está literalmente destruyendo nuestro planeta”.
Recuerdan, por ejemplo, que el aeropuerto de Es Codolar se está quedando corto para acoger a todos los jets privados que vienen a la isla. “Se esperan este año unos 11.000 jets privados. Con una ocupación media de entre 2 y 3 personas por Jet, la contaminación sólo de CO2 asciende a 1.300g de CO2/pax por km. Es decir, que estos jets “emiten 10 veces más que los aviones comerciales: 128g de CO2/pax por km)”.
“En una sola hora de vuelo pueden emitir, en función del modelo, alrededor de 2 toneladas de CO2, una contaminación desmesurada si tenemos en cuenta que un habitante de la Unión Europea (UE) tiene una huella de carbono anual de 8,3 toneladas de CO2”, explican.
Y el problema no esta solo en el aeropuerto. “El puerto de Ibiza ahora es un escaparate de yates de super lujo, como el Lady Moura, con huellas de carbono exageradas. Una excursión de ida y vuelta a Formentera para pasear a sus 20 pasajeros (y 60 tripulantes) requiere unos 1.500 litros de combustible”, afirman.
“Mientras permitamos la construcción de mega mansiones en tierras cultivables, el tráfico exagerado de barcos de recreo o la entrada ilimitada de coches seguiremos viendo un deterioro de nuestra biodiversidad tanto en el terreno fértil, como en la población marina y el colapso de nuestros ecosistemas”, alertan.
El grupo de activistas recuerdan todos los desastres climatológicos, sin precedentes, que se están registrando este año, y que están vinculados al aumento de emisiones. “Hasta los más negacionistas ya empiezan a reconocer que el cambio climático es real”, recuerdan.
Los científicos del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) remarcan que esto se debe en gran parte a las emisiones de CO2 de los seres humanos “por nuestro estilo de vida consumista e industrializado. Y los mayores consumidores son la clase de personas millonarias”, alertan.
En informe del IPCC publicado el lunes pasado «nos pinta el escenario horrendo que nos espera si no reducimos nuestras emisiones drásticamente. Si seguimos con nuestro ritmo de consumo no tardaremos a sentir los efectos devastadores», subrayan.
«Como dijo la representante de la ONU en la rueda de prensa de la presentación del informe del IPCC el lunes pasado: ningún lugar está a salvo. Los incendios, inundaciones, olas de calor, tormentas y sequías serán cada vez más severas y duraderas. Llevarán a la devastación de la biodiversidad, al colapso de ecosistemas, a la ruptura de la cadena alimenticia global, al hambre y a migraciones masivas hacia las zonas habitables», relatan.
«En España nos esperan más eventos extremos, además de la subida del mar y desertización masiva. En Ibiza somos sumamente vulnerables a la subida del mar y a la escasez de alimentos. A pesar de que hay un auge considerable de demanda de producto local, seguimos necesitando importar casi todo de lo que consumimos. ¿Qué pasará cuando las cosechas mundiales empiecen a fallar? Sólo este año se han visto daños considerables en dichos cultivos por incendios, sequías, heladas, granizadas e inundaciones», concluyen.
Mientras aumente la cartera de los 4 de siempre importa un carajo si contaminan, o no deja una posidonia en su sitio, y mientras eso no cambie aqui no hay nada que hacer, parece mentira que no nos enteramos. ‘