Entre 60 y 70 trabajadores se han concentrado este miércoles frente al hotel Club Punta Arabí, en Ibiza, para protestar contra la propiedad porque no «da señales de vida» para responder sobre el futuro de la plantilla de éste y otros dos establecimientos de la isla, ha informado UGT en las Pitiusas.
A pesar del mal tiempo, trabajadoras y trabajadores han mostrado pancartas en las que se podía leer: «Punta Arabí abandona a sus trabajadores» o «Queremos respuestas. ¿Quién se hace cargo de nosotros?» o «No somos cosas. Somos personas».
El secretario general de UGT en Ibiza y Formentera, Fernando Fernández, ha explicado que, a pesar del mal tiempo, las protestas continuarán este jueves y viernes, en el Hotel Coral y el Hotel Atlantic, respectivamente, para reclamar una respuesta por parte de la propietaria, Francisca Sánchez Ordóñez, la polémica empresaria conocida como Paquita Marsan, que es propietaria de Casa Lola, Casa Paola y KM5 y que también posee el terreno donde se ubica el mercadillo de Punta Arabí o mercadillo de es Canar.
En total, suman 250 los trabajadores fijos discontinuos que desconocen su futuro después de que la propietaria haya recuperado la gestión de estos tres establecimientos, que explotaba la empresa Azuline.
«Es muy simple, sólo tiene que decirnos dónde van a trabajar y cuántos trabajadores van a continuar», ha señalado Fernández, que ha criticado que los propietarios tenga a los empleados «en un limbo».
Todas las sociedades propietarias de los hoteles están a nombre de Sánchez Ordóñez, que es la dueña también del polémico complejo turístico ilegal, Casa Lola, en el municipio de Sant Josep.
Fernández ha insistido en la necesidad de que se pronuncie sobre el futuro de los trabajadores afectados, que pueden sumar entre 350 y 400, si se tiene en cuenta el personal de otro hotel en Menorca que está en la misma situación.
EFE / Redacción