El siempre polémico escritor francés Michel Houellebecq (Reunión, 1956) lanzará en Francia a principios de mes su nueva novela, titulada Anéantir (aniquilar o destruir en castellano), que en España tardará todavía varios meses en salir al mercado, posiblemente en agosto y con Anagrama.
En una cuidada campaña de promoción, la editorial Flammarion ha ido desvelando detalles de la esperada obra y de la que en una primera tirada se imprimirán 300.000 ejemplares.
Un escogido grupo de periodistas especializados recibió un ejemplar de la novela con la indicación de que no se podía publicar ninguna crítica de la misma antes de hoy, 30 de diciembre. Así lo han hecho hoy El País, donde Marc Bassets revela algunos detalles de la trama: Tres historias entrelazadas en las que Ibiza tiene un cierto protagonismo en la tercera.
Así, “la tercera trama narra los atentados contra un buque de contenedores frente a la costa de A Coruña, un banco de esperma en Dinamarca y un barco con migrantes en las costas de Ibiza y Formentera«.
Paul Raison, nombre del protagonista de la trama, descubre en casa de su padre unos enigmáticos documentos con indicios sobre la autoría de estos atentados. Las pistas apuntan a los “anarcoprimitivistas” cuyo proyecto “consiste en devolver a la humanidad al nivel paleolítico medio”, o a grupos de “ecolofascistas” con influencias satánicas. “Lo peor”, piensa Paul, “es que si el objetivo de los terroristas era aniquilar el mundo tal como él lo conocía, el mundo moderno, no podía quitarles del todo la razón”, describe el crítico.
Las 736 páginas de Anéantir llegarán a las estanterías en una edición de lujo especialmente creada para Houellebecq y que ya pudo verse en tres obras anteriores: Extension du domaine de la lutte (Ampliación del campo de batalla), Les Particules élémentaires (Las partículas elementales) y Plateforme (Plataforma), según revela el diario Le Parisien.
El semanario Livres hebdo, por su parte, publica que el propio autor ha supervisado detalles de la edición, como el grafismo, el gramaje del papel, del que también exigió que no debía amarillear con el tiempo, o la tipografía.
La editorial va dando detalles con cuentagotas y advierte de que la prensa especializada tendrá que conformarse con eso, porque Houellebecq no dará entrevistas de promoción.
Los primeros y priveliados lectores apuntan a que es una ‘novela de novelas’, con numerosas tramas: un thriller geopolítico “con atentados, espías y un trasfondo esotérico”, apunta El País pero también “un melodrama familiar con un patriarca ingresado en una residencia en el corazón de la campiña francesa”. Pero concluyen que, como suele ser habitual en Houellebecq, el trasfondo de la novela es «el amor» y “la fragilidad de la existencia y la soledad del hombre contemporáneo en un mundo sin dios”.