EFE / Padres y madres de alumnos y alumnas de Baleares han hecho un llamamiento este jueves para que las clases comiencen el 10 de enero de forma presencial, como estaba previsto antes de las vacaciones navideñas.
La agrupación de padres resalta que en los centros educativos no se han detectado focos de contagio de la covid-19 significativos, puesto que los positivos registrados tienen su origen en el entorno social, familiar y deportivo de los alumnos.
«Las medidas que se están aplicando en los centros educativos son de las más restrictivas, con repercusión evidente en la calidad de la enseñanza, pero aseguran la educación presencial», destaca la FAPA, para la que la presencialidad es una garantía de los mínimos de calidad.
El confinamiento en el curso pasado ha generado «perjuicios para el alumnado» y el sistema semipresencial, lastrado por carencias de planificación, formación y experiencia, no es una opción en la situación actual.
«Las aulas han de continuar siendo los lugares seguros donde se desarrolle la educación, por lo que habrá que aplicar los recursos necesarios para garantizarr esta presencialidad en todos los niveles si la pandemia nos obliga a aplicar medidas más restrictivas», incide la FAPA.