EFE/Redacción. La Obra Cultural Balear (OCB) se personará como parte interesada en el procedimiento que se sigue en el Tribunal Superior de Justicia de Baleares (TSJIB), después de la admisión a trámite de un recurso contencioso administrativo para garantizar el 25 % de clases en español en todos los centros educativos de las islas.
A finales del pasado diciembre, el TSJIB admitió a trámite un recurso contencioso administrativo de la asociación de profesores Plis Educación para instar al Govern a garantizar un mínimo del 25 % de las clases en castellano en todos los centros de enseñanza de financiación pública de las islas.
Esta asociación, que recurrió a la justicia con el apoyo jurídico de la entidad anticatalanista Sociedad Civil Balear (SCB), quiere que se obligue a la conselleria de Educación a fijar un cuarto de clases en castellano y que se imparta al menos una materia troncal, además de las de Lengua y Literatura castellanas, en la lengua del Estado.
En un comunicado, la OCB ha acusado al expresidente balear José Ramón Bauzá de intentar por la vía judicial “lo que perdió estrepitosamente en las calles y en las urnas”.
Desde la entidad han incidido en que no permitirán que “grupúsculos politizados promuevan un conflicto que la comunidad educativa no merece” y han alertado de que ello podría convertir a los centros educativos en “campos de batalla” al servicio de la ideología extremista de estas organizaciones.
La OCB ha reivindicado el marco normativo del Decreto de Mínimos que impulsó un gobierno del PP y que ha definido el modelo lingüístico educativo balear de los últimos veinticinco años. Dicho decreto en teoría garantiza que se impartan -al menos- un 50% de las clases en catalán, en tanto que lengua minorizada y excluida fuera del ámbito educativo.
Obra Cultural también ha afirmado que la imposición de un porcentaje determinado de clases en castellano va en contra de la autonomía de los centros para decidir sus proyectos lingüísticos y de lo que determina el Decreto de Mínimos sobre la lengua de impartición de las asignaturas no lingüísticas.
Por ello, la OCB ha pedido a los grupos del Parlament, que estos días debatirán sobre el proyecto de ley de educación, que se aseguren que la posición de la lengua catalana quede reforzada y garanticen que se mantenga como centro de gravedad del sistema educativo,
“El mantenimiento del marco normativo del catalán en la escuela no resulta suficiente, sino que es necesario un compromiso firme de la administración educativa para hacerlo efectivo”, han remarcado desde esta organización.
Además, la OCB ha hecho hincapié en que el catalán debe ser la lengua vehicular normalmente utilizada en las escuelas e institutos porque es la única garantía de que los alumnos finalicen la escolarización obligatoria con una competencia comunicativa suficiente en las dos lenguas oficiales.
De hecho, el Institut d’Estudis Eivissencs (IEE) se ha mostrado recientemente contrario a la ley de educación balear que se ha propuesto, y alerta de que, en caso de ser aprobada en los términos actuales, podría suponer un «retroceso del catalán». Así lo recogió Noudiari el pasado lunes.