La instalación de cerca de 2.000 paneles solares fotovoltaicos para la generación de electricidad en los hospitales públicos de las Pitiusas, Can Misses y el Hospital de Formentera, además de en los centros de salud de Sant Antoni, Vila y Sant Jordi por parte de Direcció General d’Energia i Canvi Climàtic, ha generado un ahorro que supera los 125.000 euros en los dos últimos años.
Así lo constatan los informes técnicos que calculan la electricidad producida por los sistemas de autoabastecimiento de energía renovable, fotovoltaica en este último bienio y que supera los dos millones de kilo Watios hora en todo el Área de Salud.
En Ibiza, la producción de energía obtenida de las placas solares alcanzó en los años 2021 y 2020 la cantidad de 1.140.000 kWh; mientras que en Formentera se rozaron los 60.000 kWh. Ello ha permitido evitar la emisión de más de 800 toneladas de CO2 a la atmósfera, 740 toneladas en Ibiza y 76 toneladas en la isla de Formentera.
Placas térmicas para la generación de agua caliente sanitaria
A los dos millares de paneles solares instalados para la producción de electricidad hay que sumar los sistemas de generación de agua caliente sanitaria que también se instalaron en estos últimos años los hospitales públicos de Ibiza y Formentera y en los centros de salud de Santa Eulària y de Sant Antoni, que suponen un mayor ahorro energético.
Actualmente el Hospital Can Misses dispone de 1.133 paneles solares con una potencia de 300 kWp (kilo Watios pico), el Hospital de Formentera cuenta con 136 paneles solares instalados en su cubierta con una potencia de 40 kWp, el centro de Salud de Sant Antoni de Portmany posee 330 paneles ubicados en una pérgola situada en el parking con una potencia de 100 kWp; y por último, el centro de Sant Jordi de ses Salines tiene 136 placas fotovoltaicas en su tejado con una potencia de 45 kWp.
De esta manera, según se destaca desde el Área de Salud en una nota, «se cumple con el compromiso medioambiental emprendido en 2019 que supuso la instalación de 1.145 paneles solares en el Hospital Can Misses y en los centros de salud de Vila y Sant Jordi, lo que permitió una producción anual de electricidad de 447.190 kWh». El Hospital de Formentera también dispone desde entonces de placas fotovoltaicas que le permiten abastecerse del 8 % de su consumo de energía con energías renovables.
Para la directora gerente del Área de Salud de Ibiza y Formentera, Carmen Santos, «se trata de un compromiso de eficiencia energética y medioambiental del Govern, el ahorro del consumo que supone esta transición energética está siendo de gran ayuda para el sistema sanitario público, y más teniendo en cuenta que nos encontramos en este momento de crisis». «Además, de todos los beneficios ambientales evidentes que está permitiendo al Área de Salud de Ibiza y Formentera, destaca reducir las emisiones de CO2 y continuar la senda iniciada en 2019 de instalación de sistemas de autoabastecimiento de energías renovables que ha evitado la emisión de más de 800 toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera», añade Santos.