El pleno del Parlament abordará el próximo martes la reducción de plazas turísticas prevista por el Govern y la enseñanza en castellano en los centros educativos de las islas, según el orden del día previsto para la sesión que empezará a las 9.
Tanto la presidenta del Govern, Francina Armengol, como el conseller de Modelo Económico, Turismo y Trabajo, Iago Negueruela, deberán responder a preguntas sobre los efectos de la reducción de plazas turísticas que contempla la reforma de la la Ley de Turismo que se tramita en la cámara.
Además habrá dos preguntas de Vox y de Ciudadanos para Armengol, en el turno de control al Govern, sobre la aplicación del 25 % de enseñanza en castellano en los centros de Baleares, a partir de la sentencia dictada en Cataluña.
Armengol responderá además sobre si Baleares puede perder ayudas y fondos de innovación y rehabilitación energética de edificios por falta de diligencia en la gestión.
La elevada ratio de algunos centros educativos que agrupan a alumnos de diferentes municipios y la falta de policía local en municipios pequeños, serán motivo de preguntas, así como las medidas puestas en marcha por el Govern para el retorno de talento joven a las que se comprometió en el Parlament y acerca de si el Govern se plantea bajar los impuestos a las herencias.
Habrá además dos preguntas sobre los fondos europeos: una para el conseller Negueruela, sobre qué proyectos transformadores del modelo turístico se financiarán con esos fondos UE; y otra para el de Fondos Europeos, Universidad y Cultura, Miquel Company, sobre los proyectos privados financiados con fondos europeos que cuentan con el apoyo del Govern.
El grupo parlamentario popular interpelará al Govern en relación con la falta de personal sanitario en Ibiza y Formentera; y se debatirá una moción del PP sobre la instalación de los servicios de temporada en las playas.
El pleno concluirá con el debate y votación de dos proposiciones no de ley sobre medidas dirigidas a los voluntarios de Protección Civil y sobre el acceso a la sanidad de personas con «alta fragilidad relacional».
EFE