El ruido submarino generado por la navegación costera tiene importantes efectos sobre la capacidad de comunicación del delfín mular, según explica hoy la Asociación Tursiops que añade que se calcula que en els Freus de Ibiza-Formentera, durante las horas centrales del día en agosto, «el área dónde pueden comunicarse los delfines se reduce en un 71%».
Así, por primera vez, la Asociación Tursiops ha cuantificado teóricamente cual es el efecto de la navegación costera en Ibiza y Formentera sobre la capacidad de comunicación de los delfines mulares.
Hay que recordar que esta especie usa la acústica para realizar todas sus funciones vitales.
«Como es por todos conocido, el archipiélago constituye un destino turístico de primer orden en el Mediterráneo, con un pico muy marcado los meses de verano. La actividad náutica durante esos meses se dispara, haciendo aumentar el nivel de ruido submarino considerablemente, lo que provoca una perturbación para los delfines mulares», explican.
«Simplemente, cuando hay mucho ruido, ellos se oyen con dificultad. Para conocer el alcance de la perturbación, se ha abordado el problema desde una perspectiva eminentemente formal con datos de ruido reales generados en un año de funcionamiento de una red de 7 hidrófonos fondeados alrededor de Pitiüsas», relatan.
Se ha concretado el estudio para el mes de agosto en dos zonas con una presión de navegación muy distinta, els Freus de Ibiza-Formentera y el Cap de Barbaria.
Así mismo, se ha trabajado con el ruido medio medido en las horas centrales del día, cuando la navegación es máxima y durante las primeras horas de la noche cuando la navegación es mínima.
Según esta primera aproximación teórica, en todo el entorno de Ibiza y Formentera, durante las horas centrales del día del mes de agosto se reduce el área dónde pueden comunicarse los delfines.
En la zona de Barbaria, la reducción es del 21% y en la zona de los Freus, la reducción alcanza el 71%. Los delfines pasan de poder comunicarse en un radio de cinco kilómetros y medio a poder hacerlo en un radio de un quilómetro y medio. Estos resultados, aunque son una primera aproximación simplificada, ponen de manifiesto que la navegación costera no es inocua para la vida de los delfines afectando en gran medida a su capacidad de comunicación.
Este estudio ha sido posible con el apoyo de Caixabank y la Fundación Sa Nostra mediante la Convocatoria Medio Ambiente 2021.