@Noudiari / Hay veces que hacemos difícil lo fácil y viceversa. Un joven de 23 años tuvo que ser rescatado por los bomberos en un acantilado situado entre Cap Martinet y Cala Rotja. El joven se quiso complicar la vida e intentó descender por su cuenta dicho acantilado para, según afirmó, ayudar a un ave en peligro, quedándose atrapado a tres metros del borde, sin la posibilidad de poder subir ni bajar.
Después de unos minutos de larga y tensa espera, llegaron a la zona tres patrullas de la policía local, una patrulla de la guardia civil, el servicio de emergencias y un camión de bomberos para solventar el problema. «Fue bastante fácil. Sólo hubo que lanzar una cuerda y el joven subió por ella sin ninguna complicación», aseguran desde el parque de bomberos. Están tan acostumbrados a hacer sencillo lo que parece difícil que ya no le dan ni importancia. El joven no sufrió heridas pero, eso sí, se lo pensará dos veces antes de practicar barranquismo.
Cala Roja (femení de ROIG) és el nom de la cala dels voltants de Cap Martinet, això de Rotja és una mallorquinada.
El mateix passa amb el peix del mateix oferit als restaurants.