El exciclista profesional Lance Edward Armstrong, ganador del Tour de Francia en siete ocasiones consecutivas (1999-2005) que le fueron retirados por dopaje, se encuentra de vacaciones en Ibiza, por cuyas carreteras ha estado rodando en bicicleta junto al ceo del operador de telefonía Sprint Corporation y fundador de Brightstar Corporation, Marcelo Claure, con quien se ha fotografiado en uno de sus paseos ciclistas por la isla.
Armstrong pasó en un tiempo récord de héroe a villano del deporte. Ganó en siete ocasiones la ronda francesa, la prueba por etapas más prestigiosa del mundo, pero perdió todas esas victorias al probarse que lo hizo dopado, haciendo trampas. Armstrong admitió haber usado EPO, testosterona y transfusiones de sangre para mejorar el rendimiento durante su carrera deportiva.
Tras reconocer todas las acusaciones de dopaje y admitir su culpa, el ciclista, arrepentido, se retiró de la práctica activa del ciclismo sumido en la vergüenza después de haber protagonizado uno de los episodios más escandalosos de fraude en el ámbito del deporte. Ahora, ajeno a todo aquello, disfruta de sus vacaciones en la isla a lomos de una bicicleta.
El exciclista profesional Lance Edward Armstrong, ganador del Tour de Francia en siete ocasiones consecutivas (1999-2005) que le fueron retirados por dopaje, se encuentra de vacaciones en Ibiza, por cuyas carreteras ha estado rodando en bicicleta junto al ceo del operador de telefonía Sprint Corporation y fundador de Brightstar Corporation, Marcelo Claure, con quien se ha fotografiado en uno de sus paseos ciclistas por la isla.
Armstrong pasó en un tiempo récord de héroe a villano del deporte. Ganó en siete ocasiones la ronda francesa, la prueba por etapas más prestigiosa del mundo, pero perdió todas esas victorias al probarse que lo hizo dopado, haciendo trampas. Armstrong admitió haber usado EPO, testosterona y transfusiones de sangre para mejorar el rendimiento durante su carrera deportiva.
Tras reconocer todas las acusaciones de dopaje y admitir su culpa, el ciclista, arrepentido, se retiró de la práctica activa del ciclismo sumido en la vergüenza después de haber protagonizado uno de los episodios más escandalosos de fraude en el ámbito del deporte. Ahora, ajeno a todo aquello, disfruta de sus vacaciones en la isla a lomos de una bicicleta.
El exciclista profesional Lance Edward Armstrong, ganador del Tour de Francia en siete ocasiones consecutivas (1999-2005) que le fueron retirados por dopaje, se encuentra de vacaciones en Ibiza, por cuyas carreteras ha estado rodando en bicicleta junto al ceo del operador de telefonía Sprint Corporation y fundador de Brightstar Corporation, Marcelo Claure, con quien se ha fotografiado en uno de sus paseos ciclistas por la isla.
Armstrong pasó en un tiempo récord de héroe a villano del deporte. Ganó en siete ocasiones la ronda francesa, la prueba por etapas más prestigiosa del mundo, pero perdió todas esas victorias al probarse que lo hizo dopado, haciendo trampas. Armstrong admitió haber usado EPO, testosterona y transfusiones de sangre para mejorar el rendimiento durante su carrera deportiva.
Tras reconocer todas las acusaciones de dopaje y admitir su culpa, el ciclista, arrepentido, se retiró de la práctica activa del ciclismo sumido en la vergüenza después de haber protagonizado uno de los episodios más escandalosos de fraude en el ámbito del deporte. Ahora, ajeno a todo aquello, disfruta de sus vacaciones en la isla a lomos de una bicicleta.
El exciclista profesional Lance Edward Armstrong, ganador del Tour de Francia en siete ocasiones consecutivas (1999-2005) que le fueron retirados por dopaje, se encuentra de vacaciones en Ibiza, por cuyas carreteras ha estado rodando en bicicleta junto al ceo del operador de telefonía Sprint Corporation y fundador de Brightstar Corporation, Marcelo Claure, con quien se ha fotografiado en uno de sus paseos ciclistas por la isla.
Armstrong pasó en un tiempo récord de héroe a villano del deporte. Ganó en siete ocasiones la ronda francesa, la prueba por etapas más prestigiosa del mundo, pero perdió todas esas victorias al probarse que lo hizo dopado, haciendo trampas. Armstrong admitió haber usado EPO, testosterona y transfusiones de sangre para mejorar el rendimiento durante su carrera deportiva.
Tras reconocer todas las acusaciones de dopaje y admitir su culpa, el ciclista, arrepentido, se retiró de la práctica activa del ciclismo sumido en la vergüenza después de haber protagonizado uno de los episodios más escandalosos de fraude en el ámbito del deporte. Ahora, ajeno a todo aquello, disfruta de sus vacaciones en la isla a lomos de una bicicleta.
El exciclista profesional Lance Edward Armstrong, ganador del Tour de Francia en siete ocasiones consecutivas (1999-2005) que le fueron retirados por dopaje, se encuentra de vacaciones en Ibiza, por cuyas carreteras ha estado rodando en bicicleta junto al ceo del operador de telefonía Sprint Corporation y fundador de Brightstar Corporation, Marcelo Claure, con quien se ha fotografiado en uno de sus paseos ciclistas por la isla.
Armstrong pasó en un tiempo récord de héroe a villano del deporte. Ganó en siete ocasiones la ronda francesa, la prueba por etapas más prestigiosa del mundo, pero perdió todas esas victorias al probarse que lo hizo dopado, haciendo trampas. Armstrong admitió haber usado EPO, testosterona y transfusiones de sangre para mejorar el rendimiento durante su carrera deportiva.
Tras reconocer todas las acusaciones de dopaje y admitir su culpa, el ciclista, arrepentido, se retiró de la práctica activa del ciclismo sumido en la vergüenza después de haber protagonizado uno de los episodios más escandalosos de fraude en el ámbito del deporte. Ahora, ajeno a todo aquello, disfruta de sus vacaciones en la isla a lomos de una bicicleta.
El exciclista profesional Lance Edward Armstrong, ganador del Tour de Francia en siete ocasiones consecutivas (1999-2005) que le fueron retirados por dopaje, se encuentra de vacaciones en Ibiza, por cuyas carreteras ha estado rodando en bicicleta junto al ceo del operador de telefonía Sprint Corporation y fundador de Brightstar Corporation, Marcelo Claure, con quien se ha fotografiado en uno de sus paseos ciclistas por la isla.
Armstrong pasó en un tiempo récord de héroe a villano del deporte. Ganó en siete ocasiones la ronda francesa, la prueba por etapas más prestigiosa del mundo, pero perdió todas esas victorias al probarse que lo hizo dopado, haciendo trampas. Armstrong admitió haber usado EPO, testosterona y transfusiones de sangre para mejorar el rendimiento durante su carrera deportiva.
Tras reconocer todas las acusaciones de dopaje y admitir su culpa, el ciclista, arrepentido, se retiró de la práctica activa del ciclismo sumido en la vergüenza después de haber protagonizado uno de los episodios más escandalosos de fraude en el ámbito del deporte. Ahora, ajeno a todo aquello, disfruta de sus vacaciones en la isla a lomos de una bicicleta.
El exciclista profesional Lance Edward Armstrong, ganador del Tour de Francia en siete ocasiones consecutivas (1999-2005) que le fueron retirados por dopaje, se encuentra de vacaciones en Ibiza, por cuyas carreteras ha estado rodando en bicicleta junto al ceo del operador de telefonía Sprint Corporation y fundador de Brightstar Corporation, Marcelo Claure, con quien se ha fotografiado en uno de sus paseos ciclistas por la isla.
Armstrong pasó en un tiempo récord de héroe a villano del deporte. Ganó en siete ocasiones la ronda francesa, la prueba por etapas más prestigiosa del mundo, pero perdió todas esas victorias al probarse que lo hizo dopado, haciendo trampas. Armstrong admitió haber usado EPO, testosterona y transfusiones de sangre para mejorar el rendimiento durante su carrera deportiva.
Tras reconocer todas las acusaciones de dopaje y admitir su culpa, el ciclista, arrepentido, se retiró de la práctica activa del ciclismo sumido en la vergüenza después de haber protagonizado uno de los episodios más escandalosos de fraude en el ámbito del deporte. Ahora, ajeno a todo aquello, disfruta de sus vacaciones en la isla a lomos de una bicicleta.
El exciclista profesional Lance Edward Armstrong, ganador del Tour de Francia en siete ocasiones consecutivas (1999-2005) que le fueron retirados por dopaje, se encuentra de vacaciones en Ibiza, por cuyas carreteras ha estado rodando en bicicleta junto al ceo del operador de telefonía Sprint Corporation y fundador de Brightstar Corporation, Marcelo Claure, con quien se ha fotografiado en uno de sus paseos ciclistas por la isla.
Armstrong pasó en un tiempo récord de héroe a villano del deporte. Ganó en siete ocasiones la ronda francesa, la prueba por etapas más prestigiosa del mundo, pero perdió todas esas victorias al probarse que lo hizo dopado, haciendo trampas. Armstrong admitió haber usado EPO, testosterona y transfusiones de sangre para mejorar el rendimiento durante su carrera deportiva.
Tras reconocer todas las acusaciones de dopaje y admitir su culpa, el ciclista, arrepentido, se retiró de la práctica activa del ciclismo sumido en la vergüenza después de haber protagonizado uno de los episodios más escandalosos de fraude en el ámbito del deporte. Ahora, ajeno a todo aquello, disfruta de sus vacaciones en la isla a lomos de una bicicleta.