El calor se ha convertido en un problema para muchos centros escolares de Ibiza y Formentera que no cuentan con sistemas de climatización ni están bien adaptados para las altas temperaturas.
Un problema que se ha visto agravado por el aumento de las olas de calor, también en junio y septiembre, cuando el curso está en marcha.
En este sentido, la Dirección General de Planificación, Ordenación y Centros y la Dirección General de Personal Docente han elaborado un Protocolo de actuación en centros educativos frente altas temperaturas excepcionales, «con el fin de velar por el bienestar y la salud de los usuarios de los centros», informan.
Los centros educativos de Baleares han recibido este documento de la Conselleria, «dado que las olas de calor en las islas son cada vez más habituales», y por ello se ha optado por establecer un periodo de actuación ante situaciones de este tipo, han apuntado en un comunicado desde la Conselleria de Educación y Formación Profesional.
El protocolo se puede activar entre el 1 de junio y el 31 de julio, y del 1 al 30 de septiembre, sin perjuicio que se pueda hacer en otros momentos si las condiciones meteorológicas así lo determinan.
Será la Dirección General de Planificación, Ordenación y Centros la que informará en los centros de la activación del protocolo a partir del boletín de aviso determinado por la Dirección General de Emergencias e Interior y con los valores aportados diariamente por la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). La información que se proporciona es predictiva y establece cuatro niveles de alerta meteorológica: verde, amarillo, naranja y roja. La alerta se activa a partir del nivel amarillo.
Para el nivel de alerta amarillo se establecen medidas generales, a partir del nivel naranja las medidas organizativas se amplían, son más específicas, teniendo en cuenta las actividades lectivas, las complementarias y extraescolares, y los servicios complementarios, como la escuela matinera, el comedor escolar y el transporte escolar.
El Protocolo también contiene recomendaciones generales de protección, seguridad y bienestar, entre las que se pueden destacar las de mantenerse hidratado, permanecer el mayor tiempo posible en lugares frescos, a la sombra o climatizados, y refrescarse cada vez que se necesite, o consultar a un profesional sanitario ante síntomas que se prolonguen más de una hora y que puedan estar relacionados con las altas temperaturas.
La Conselleria que dirige Martí March ha recordado que las temperaturas elevadas son frecuentes en la primera y última parte del calendario escolar, siendo los meses más afectados mayo, junio, septiembre y octubre, lo que puede dificultar el desarrollo normal de la actividad educativa en los centros docentes.
Los objetivos son, entre otros, «garantizar la atención educativa del alumnado en situaciones excepcionales y adaptar la prestación del servicio educativo, proporcionar pautas de actuación para dar respuesta a posibles situaciones provocadas por altas temperaturas, y fomentar entre el alumnado las actitudes y competencias propias de la cultura de la prevención».
Medidas que se complementarán con actuaciones del Ministerio
Por otra parte, se prevé que este Protocolo se complemente con la medida anunciada por el Ministerio de elaboración de un plan de adaptación climatológica para mejorar las condicionas de confort termohigrométricas, así como las de calidad y renovación del aire en los centros educativos públicos, en el marco de los programas de cooperación territorial del Ministerio de Educación y Formación Profesional, durante el próximo 2023.
Este plan incluirá estudios técnicos específicos de análisis de la realidad bioclimática y de confort de los centros docentes para determinar sus características a partir de su ubicación geográfica, orientación, grado de exposición al sol, tipología constructiva, materiales de construcción empleados, calidad del aislamiento, etc., para determinar la necesidad de realizar en los centros actuaciones en materia de aislamiento térmico (aislamiento de tejados, fachadas y ventanas), ventilación, instalación de sistemas de climatización, de ajuste de la temperatura o zonas de sombra en los espacios exteriores.