Kumharas celebra 25 años. Y lo hace con música, con dos conciertos. De los buenos. El primero de ellos, el miércoles que viene, con La Mari de Chambao como plato fuerte. El segundo, cuatro días después, el domingo día 9, con el grupo local Joven Dolores como protagonista. Se da la casualidad de que Chambao ya actuó en este icónico rincón de la bahía de Portmany hace 20, poco después de su fundación.
Y regresa a la isla para celebrar, también, su cumpleaños y rememorar aquella memorable actuación de la mano de su vocalista. Ambos días, Kumharas abrirá puertas a las seis de la tarde. Tanto un concierto como otro es gratuito, aunque, eso sí, el aforo del local es limitado y la entrada se establecerá, como de costumbre, por orden de llegada.
Han pasado 25 años desde que Miguel Maymó apostara por la bahía de Portmany como plataforma para su negocio, que viajaba de Vila a Sant Josep con una idea clara, ofrecer un ambiente alternativo, original, diferente. Aunque con el paso de los años las cosas cambian, la filosofía de Kumharas sigue siendo la misma del el primer día: no hay zonas VIP, no se hacen reservas y si alguien quiere una mesa u otra tiene que llegar antes que otros clientes para agenciársela. El negocio es el reflejo de cómo su propietario ve Ibiza, de cómo cree que debería ser la isla. Y esa es y ha sido, sin dudas, la clave del éxito de su establecimiento.
Sobre los conciertos, Maymó comenta que, en el caso de La Mari de Chambao, le une, además de la música, la amistad, y le hace especial ilusión el hecho de que pueda celebrar el aniversario de su grupo en su local a la vez que este hace lo propio, aunque con cinco años más en la mochila. Muchas velas por soplar… Respecto a Joven Dolores, el propietario de Kumharas señala que ha apostado por esta banda para esta ocasión porque, bajo su punto de vista, es el grupo local con mayor proyección de la toda isla en la actualidad y que hace tiempo que tenía ganas de poder contar con sus componentes en su local.
Programa completo en Kumharas, en definitiva, para la semana en la que, además de cumplir un año más, el establecimiento dice adiós a la temporada de 2022, en la que la diversión, el entretenimiento y la música han vuelto a ser los platos fuertes de ese verano desigual que se vive, desde hace un cuarto de siglo, al otro lado de la bahía.