En 1986, una noticia saltó a los titulares de medio mundo y las televisiones se volcaron en tomar imágenes del fenómeno. Un niño de la Alpujarra de solo 14 meses y que se llamaba Osel Hita Torres fue reconocido como la reencarnación de un maestro budista tibetano llamado Thubten Yeshe (Lama Yeshe), que tenía una gran influencia sobre los jóvenes hippies.
Inmediatamente aquel bebé, que hoy tiene 37 años, fue conocido como ‘El Niño Lama Español’.
De la Alpujarra fue llevado a la India pero en su vida Ibiza jugó un papel importante ya que su madre se trasladó a vivir a la isla y la visitó con permisos especiales durante su estancia en el santuario de la India.
En una de esas visitas coincidió con el poeta ibicenco Ben Clark, que es casi de la misma edad, un encuentro en el que, como recuerda el poeta en un reciente artículo en la revista de Las Dalias, el chico parecía más interesado en temas propios de su edad de entonces (17 años) como sacarse el carnet de moto y en las películas de Matrix que en hablar de budismo.
El cineasta argentino Lucas Figueroa se quedó fascinado al leer las memorias de su madre, María Torres, e inmediatamente quiso contar la historia de aquel bebé que fue llevado a la india y que estuvo viviendo en un santuario los primeros 16 años de su vida hasta que abandonó el templo y renunció a sus votos como monje budista.
Cuando abandonó el templo volvió a Ibiza, una isla que sí le había fascinado. «La primera tarde que estuve en Ibiza mi madre me llevó a una playa nudista, y, por la noche, a la gala de la juventud de la discoteca Pacha. Pasé de un monasterio donde ni siquiera había música a aquello», explica Osel en el documental.
Y es que lo que nadie esperaba es que, tras cumplir los 18, aquel joven presuntamente reencarnado cambiaría el monasterio «por las discotecas de Ibiza, entrando de lleno a un mundo abierto a la experimentación occidental en su sentido más amplio”, reza la sinopsis de esta serie documental.
El director ha empleado cinco años de su vida en este proyecto, en el que comenzó entrevistando a todas las personas del entorno de Osel, hasta que el propio protagonista se acercó a él para contarle su historia en primera persona. Aunque estaba escarmentado del trato que había recibido por parte de la prensa durante sus años de ‘lama elegido’, vio en Figueroa una persona de confianza y se abrió con él.
Figueroa ha podido incluir numeroso material inédito, además de seleccionar planos de las horas y horas de televisión que le dedicaron los medios en su día, hasta que el tema dejó de interesar.
«Soy una persona normal que ha vivido una historia extraordinaria» afirma Osel en una de las entrevistas que ha concedido con motivo del estreno del documental en el que se puede seguir los pasos de un chico que pasó de vivir 16 años entre las cuatro paredes de un templo, comiendo la misma comida todos los días y sin apenas oportunidades de socialización a experimentar en Ibiza todo un despertar.
Pero no todo fue malo en el santuario. Aunque Osel Hita dejó los hábitos y la práctica del budismo, asegura que en su vida han sido muy importantes los valores que le inculcaron durante su formación y que sí son su filosofía de vida como la empatía y el amor al prójimo.
La serie se estrena en HBO Max mañana jueves 3 de noviembre.