EFE / La recuperación del poder adquisitivo de los profesionales de los medios de comunicación, la mejora real de las condiciones de los trabajadores de informativos de IB3 y las cláusulas sociales en la contratación de publicidad institucional son algunas de las reivindicaciones planteadas por el Sindicato de Periodistas de las Islas Baleares (SPIB) en 2023.
La organización sindical incide este lunes en una nota en que la publicidad que las administraciones públicas hacen en diarios, televisiones, radios y medios digitales «no puede amparar el maltrato a los trabajadores» y recalca que las empresas tienen que cumplir unos requisitos mínimos de respeto de los derechos de sus empleados para recibir fondos públicos, con unas condiciones que deben ser «objetivas y reguladas».
Respecto al poder adquisitivo de los trabajadores, desde SPIB hacen hincapié en que los salarios en medios públicos y privados están estancados desde la crisis de 2008, lo que supone una «merma muy notable» de los ingresos reales de los trabajadores de la comunicación.
El sindicato también solicitado de cara al nuevo año nuevos convenios «dignos» en los diarios Última Hora y Diario de Mallorca, donde sus comités negocian con sus empresas nuevos convenios colectivos para mejorar sus condiciones. «2023 debe ser el año en que los dueños de los dos periódicos reconozcan y fomenten con salarios y condiciones dignos el buen hacer de sus trabajadores», apunta el SPIB.
Otro de los puntos planteados es la mejora «real» de los trabajadores de informativos de IB3. La internalización de los trabajadores de los servicios informativos, prometida por el Govern para febrero, «supone un avance en la estabilidad» pero «parten con las mismas condiciones que tenían en la empresa subcontratada, precarias en salarios y desiguales» respecto a sus compañeros ya contratados por el ente público.
Además, el SPIB ha recordado que la libertad de expresión y opinión es un derecho de todos los ciudadanos y que los vetos a profesionales por parte de partidos políticos u otras entidades son «contrarios a las libertades democráticas».
También aboga por rechazar comparecencias sin preguntas y actos electorales «camuflados» como ruedas de prensa y dice «no» a las cuotas electorales en los informativos, dado que se impone a las televisiones y radios públicas que durante las campañas electorales cronometren el tiempo en los informativos para que los partidos en liza tengan una presencia proporcional a su resultado en las elecciones anteriores, «es contraria a la libertad periodística» y «pone en cuestión la imparcialidad de los profesionales».
El SPIB reclama que se respete el secreto profesional, que haya más transparencia por parte de las instituciones y que haya un mayor control y sanción de los abusos contras los autónomos, los becarios y los trabajadores en prácticas.
«La precarización del periodismo ha ampliado la subcontratación de trabajos en favor de autónomos y periodistas a la pieza”, y ha agravado el problema histórico «del uso indebido de becarios y trabajadores en prácticas como fuerza laboral», alertan desde el SPIB, que hace un llamamiento a las empresas públicas y privadas, los responsables institucionales y los dirigentes políticos a favorecer el cumplimiento de este decálogo de cara a 2023.