En su momento pasó desapercibido, pero el nombre de la televisión autonómica deriva de las tres partes en que, según los que la montaron, se componen las Illes Balears: Mallorca, Menorca y Eivissa-Formentera (así se publicitaba incluso en paneles informativos en la calle, con el guión, sin conjunción copulativa). Y, si desde el momento en que se creó, las dos pitiusas debían repartirse los mismos recursos y minutos de programación con que contaba Menorca por sí sola, ahora el recorte es todavía mayor.
Estos son los datos que prevé el Expediente de Regulación de Empleo que prepara CBM, la empresa adjudicataria de los servicios informativos, y que hoy han presentado los trabajadores ibicencos: Mallorca pierde el 8% de la plantilla (11 de 114), Menorca el 40% (5 de 13), Eivissa el 45% (6 de 14, pero hay que tener en cuenta que son 13 plazas, ya que una de ellas se la dividen dos personas a media jornada, no como en Menorca) y Formentera el 100% (2 de 2). Un descenso significativamente mayor si se tiene en cuenta que la plantilla de Eivissa cubrirá la información de las dos islas.
«Eivissa siempre ha sufrido más con los recortes», lamenta la delegada sindical, María Moya, quien asegura que «aquí ya no se puede cortar más, quedamos prácticamente desmantelados». El malestar de la plantilla es aún mayor si se tiene en cuenta que IB3 cuenta en 2013 con el mismo presupuesto de 2012, 30 millones de euros, «pero como este año han gastado más de lo que correspondía, han decidido quitar 1,3 millones a la cantidad que se destina a los servicios informativos. Es decir, que nos vamos gente a la calle por la mala gestión de los directivos».
Ninguno de los recortes de IB3 se va aplicar a su cúpula directiva ni al personal del ente, sino que ahorran «en los servicios informativos, cuando se supone que son el emblema y la marca de calidad en cualquier televisión»).
Huelga
Ante esta situación, la plantilla de IB3 en el conjunto de Balears ha aprobado en asamblea declararse en huelga indefinida a partir del día 20 para exigir la retirada de un ERE que consideran «nulo e injusto» y que se presenta con nombres y apellidos de los despedidos el día 23. «IB3 no quiere sentarse con nosotros en la mesa de negociación, se desentiende porque dice que eso es cosa de una empresa privada (CBM) y no nos quieren entregar su documentación contable que justifique el recorte en el presupuesto de informativos, con la que queremos demostrar que se puede recortar por otro lado y no en los trabajadores».
Por su parte, la empresa adjudicataria se ha mostrado favorable a reducir los salarios y así la cantidad de despidos, una opción que no satisface a los trabajadores porque «queremos que IB3 se siente a negociar y se niega». «Que den la cara y presenten las cuentas», sentencia Moya.