EFE / La Policía Nacional ha detenido en Palma a una mujer de 54 años a la que acusa de drogar con fármacos diluidos en su café a un hombre octogenario y aprovechar su aturdimiento para pedirle dinero prestado y robarle.
Según ha informado la Jefatura Superior de Policía de Baleares en un comunicado, a la detenida, de nacionalidad boliviana, se le imputa el delito de robo con violencia e intimidación por sumisión química.
El pasado sábado por la noche, un hombre alertó al 091 de que un conocido suyo había sido drogado y se encontraba en mal estado, por lo que una patrulla se desplazó hasta el domicilio de la víctima, que a la llegada de los agentes estaba pendiente del traslado en ambulancia a un centro sanitario.
El denunciante relató que por la mañana había paseado con el octogenario, que se encontraba en perfecto estado, pero alrededor de las 20 horas había recibido una llamada de un familiar del anciano residente en la península para pedirle que se acercara a su casa porque le había telefoneado y estaba mal de salud.
Explicó que, efectivamente, cuando llegó a la vivienda encontró mareado y aturdido a la víctima, que tardó en abrirle la puerta y se cayó al suelo mientras caminaba, por lo que llamó a la Policía, a la que contó que el anciano le había explicado que había prestado dinero a una amiga suya.
Los policías recabaron la información y acudieron junto al hombre hasta un centro sanitario donde se determinó que estaba intoxicado por ingesta de benzodiacepinas, un tipo de medicamentos psicotrópicos.
La investigación del Grupo de Atracos de la Policía Nacional determinó que por la tarde la víctima y su amiga estuvieron en una cafetería el centro de Palma, donde, según constataron los agentes, la mujer hizo «una maniobra extraña» en la que pudo haber vertido la droga en el café de su acompañante.
Luego propuso al octogenario dar un paseo y, cuando él empezó a sentirse mal y perder el equilibrio, la acompañante le restó importancia, le pidió dinero y fue con él hasta un cajero automático.
Además del dinero que le había solicitado, el hombre extrajo más para él, pero ella se lo quitó de las manos.
La víctima no recordaba qué ocurrió después hasta que el hombre que acudió en su ayuda llamó a la puerta de su casa.
La detención se produjo en tarde de este jueves.