El Ayuntamiento de Sant Antoni de Portmany ha puesto esta mañana en funcionamiento el servicio de barreras de control automáticas para regular el tráfico de zonas que se encuentran total o parcialmente peatonalizadas en el casco urbano.
El alcalde de Sant Antoni y responsable de Obras Públicas, Marcos Serra, y el concejal de Movilidad y Vía Pública, David Márquez, han presentado esta mañana este nuevo sistema para la restricción de acceso de vehículos no autorizados, que se aplica en determinadas calles del núcleo histórico de los alrededores de la iglesia y la zona del West End.
Serra ha explicado que se han instalado un total de 22 pivotes con sistema de apertura mediante mando a distancia, que se han situado en 17 puntos de acceso al núcleo urbano. “Es una medida importante para mejorar el control de los accesos y facilitar la movilidad peatonal de los vecinos de Sant Antoni con zonas más amables y sin tráfico de vehículos”, ha destacado Serra, que ha explicado que es un sistema con “tecnología avanzada y segura” que garantiza que el servicio sea eficiente para todos los usuarios, habilitándose mandos de acceso para los casos previstos.
Según ha detallado, con este proyecto se han sustituido los pivotes que había con sistema manual y se han ampliado los puntos de control existentes. “Algunos restringen el tráfico completamente y otros están regulados por un horario establecido según la ordenanza municipal de tráfico, circulación y seguridad vial”, ha indicado.
Las limitaciones de acceso no afectarán a los servicios municipales y de emergencias, a las personas con movilidad reducida ni a los vecinos que dispongan de un parking en la zona restringida, a los cuales se les facilitará un mando para que puedan pasar en cualquier momento del día sin limitación de franja horaria.
Las pilonas se han ubicado en las calles Vara de Rey, Sant Antoni, Ample, Rossell, Ignasi Riquer, Santa Agnès, Bisbe Torres, Bisbe Cardona, plaza de la iglesia y Passeig de ses Fonts.