La Comisión de Turismo de la CAEB, que preside María Frontera, se ha reunido hoy al mediodía en la sede de la patronal balear en un encuentro al que ha asistido los representantes del PSIB-PSOE Iago Negueruela y Alfonso Rodríguez, y donde se han planteado una serie de problemáticas que causan “graves perjuicios al turismo”, principal actividad económica de Baleares, y por ende dañan la imagen de Baleares. El insuficiente transporte público, la escasez de vivienda y la falta de trabajadores son los principales problemas que afectan de forma común al sector turístico, a las asociaciones que lo engloban y a los ciudadanos, según se ha puesto esta mañana de manifiesto.
Los representantes de las asociaciones presentes (FEHM, AVIBA, ACH, Asociación Campos de golf, ACBIB, ABONE, AENIB, ANADE, ASHOME, IB-ACTIVA, Restauración CAEB, EFEDECO, ABACTUR, SAREIBA) han recalcado la importancia de la colaboración público-privada efectiva, que además de dialogar y establecer puentes de cooperación, supone pasar a la acción. Para que los problemas no se enquisten y se conviertan en estructurales, “además de hablarlo, hay que gestionarlos”, aseguró Frontera.
“Cuando en Baleares la colaboración público-privada se ha puesto en marcha de verdad, es cuando hemos salido reforzados. No se puede desaprovechar el conocimiento y capacidad de gestión de la iniciativa privada. Además de dialogar, hace falta capacidad para reconocer la necesidad de modernización de la Administración en sus procesos, a través de herramientas al alcance de todos, como la digitalización y que ya han puesto en marcha muchos ostros destinos, más allá de la prohibición”, añadió la presidenta de la comisión de turismo.
Dos de los problemas más preocupantes en Baleares son la falta de vivienda y las carencias en materia de transporte público ya que durante muchos años no ha tenido en cuenta el fuerte crecimiento demográfico experimentado, un 40% en los últimos 20 años.
Transporte público sin dimensionar y gestión obsoleta
Por una parte, en materia de SP de Taxi, en la mayoría de los municipios, no se han concedido nuevas licencias en los últimos 20 años teniendo un servicio deficitario para residentes y visitantes. Hace años que se reclama la articulación de licencias temporales de actividad, un servicio global, atención telefónica y aplicaciones tecnológicas orientadas a dar el mejor servicio al usuario y optimizar los trayectos que se hacen de vacío (contrario a las medidas de sostenibilidad ambiental). La aprobación reciente de un decreto para regular esta materia “llega tarde y mal porque no resuelve ninguna de estas cuestiones para la temporada turística que ya ha comenzado” y aboca a una nueva temporada con numerosos problemas (pérdida de vuelos, pérdida de negocio en la oferta complementaria por la anulación de reservas, personas que se desplazan a lugares distintos a los que se alojan sin que luego tengan opción de regresar, etc) y riesgo elevadísimo de caída reputacional de la imagen del destino al no contar con transporte público suficiente y eficiente.
El transporte colectivo terrestre también adolece de falta de interconexión entre municipios y núcleos de población, falta de frecuencias, horarios ampliados que posibiliten que los trabajadores puedan usar el transporte colectivo en vez del vehículo particular.
Pérdida de competitividad por falta de vivienda y trabajadores
Otra cuestión que lastra el desarrollo económico balear es la falta de vivienda y la carestía de la existente. Una solución habitacional es indispensable que los trabajadores residentes en las Islas, así como aquellos que vengan a las Illes Balears a trabajar, puedan disponer de una vivienda digna a precios asequibles para poder desarrollar su trabajo ya que hay falta de mano de obra en todos los sectores debido, principalmente, a esta problemática. Hay que adoptar múltiples soluciones a la vez para desbloquear esta situación.
La formación constituye un objetivo estratégico para reforzar la productividad y la competitividad empresarial. Se deben elaborar ofertas formativas de acuerdo con la demanda de los sectores de actividad y utilizar las facilidades que aporta la tecnología para facilitar el acceso al conocimiento y la conciliación. No únicamente desarrollar centros educativos. Los planes formativos deben adecuarse y acercarse más a la realidad empresarial.
Aparte de la vivienda y la movilidad, la Comisión de Turismo de CAEB también ha señalado que, ante la regulación que afecta a la competitividad de las empresas, es preciso unificar normativa, digitalizarla y simplificar la tramitación, sin reducir el control. “Debemos insistir en reducir la carga ideológica que aplican los partidos políticos a la hora de legislar ya que la normativa a aplicar debe poder perdurar en el tiempo indistintamente del partido político que gobierne”.