El mercado inmobiliario en España se ha desacelerado de forma desigual en la primera mitad del año: mientras en Madrid el «stock» de vivienda se agota y en Andalucía y Baleares, precios y demanda siguen en aumento, en Cataluña y la Comunidad Valenciana sí se percibe una cierta ralentización del mercado.
Así lo refleja el «Mapa del Tiempo Urbanístico», publicado este miércoles por la Sociedad de Tasación, que ofrece una radiografía del sector en la primera mitad de 2023.
Según el análisis de la Sociedad de Tasación, en la franja mediterránea se observa una escasez de vivienda nueva en Barcelona, mientras en Andalucía, Granada, Sevilla, y sobre todo Málaga, lideran la producción de obra nueva.
En Cataluña, la falta de nuevos inmuebles y el aumento de los costes de construcción están ralentizando la actividad inmobiliaria de Barcelona, Girona y Tarragona.
En la capital catalana, la oferta de vivienda nueva y de alquiler sigue siendo escasa y los costes de construcción continúan presentando una tendencia alcista y cifras elevadas.
Al igual que en buena parte de Cataluña, en la Comunidad Valenciana y en su capital la actividad inmobiliaria muestra signos de ralentización, pero esto aún no se ha reflejado en los precios, que se mantienen estables.
Como indica el estudio de la Sociedad de Tasación, el incremento de los costes de construcción y del suelo ha provocado que disminuya la oferta disponible y algunas obras se hayan paralizado o ralentizado.
En Andalucía destaca el caso de Málaga, donde la actividad se está registrando sobre todo en la capital y en la Costa del Sol.
Allí, los precios continúan al alza y, según la Sociedad de Tasación, el suelo escasea para todos los usos en la ciudad de Málaga.
«La demanda continúa siendo muy activa también en sectores más allá del residencial, lo que denota un ritmo pleno de actividad y refuerza este interés creciente», señala el comunicado.
En Murcia, la actividad promotora se está concentrando en la capital, donde los precios y la demanda de vivienda siguen aumentando.
En las regiones del interior de España contrasta la realidad de Madrid con el resto de regiones, donde la actividad inmobiliaria es más moderada.
Según el estudio de la Sociedad de Tasación, en Madrid, los precios de la obra nueva continúan aumentando, mientras que, en la vivienda usada, perciben una dinámica «algo inferior».
El coste de construcción continúa al alza en la capital y alcanza niveles de hasta 1.500 euros el metro cuadrado en obra nueva y entre 1.800 y 2.000 €/m2 en rehabilitación.
En el caso de Castilla y León, la actividad inmobiliaria se concentra en León, Salamanca, Valladolid y Burgos, y está impulsada principalmente por el uso residencial, ya que según la Sociedad de Tasación, está estancada en otros usos, como en el sector industrial o en la apertura de oficinas o centros comerciales.
En Castilla-La Mancha, el mercado de la vivienda se está manteniendo sobre todo en las provincias limítrofes con Madrid, debido al reclamo de la capital y a los desarrollos logísticos en Guadalajara y Toledo, por lo que son estas provincias las que lideran el crecimiento de la comunidad.
La actividad inmobiliaria en Extremadura se concentra principalmente en las ciudades de Badajoz, Cáceres y Mérida.
En el caso de La Rioja, la situación se mantiene estable y no se han experimentado grandes aumentos de precios, por lo que hay, según la Sociedad de Tasación, una «clara tendencia» hacia la estabilización del mercado.
La dinámica inmobiliaria sigue siendo elevada en Aragón, aunque según explican desde la Sociedad de Tasación, se observa una desaceleración en el crecimiento de la demanda, ya que la financiación es cada vez menos accesible.
En análisis de la Sociedad de Tasación refleja que Baleares mantiene niveles máximos en el precio de la vivienda y del alquiler desde 2007, aunque en el último mes se han comenzado a detectar ligeras disminuciones de precios.
Sin embargo, en los municipios más atractivos, el precio continúa aumentando y hay un desfase entre la oferta, que es muy escasa, y la demanda, que es muy alta.
En Canarias, la recuperación del turismo tras la pandemia está impulsando la actividad inmobiliaria y la renovación hotelera, y se observa una ampliación de la oferta tanto a través de nuevos proyectos como de la renovación de instalaciones hoteleras existentes.
En Galicia, la oferta y el precio del suelo se mantienen estáticos pese a la presión de los costes de construcción.
Según el análisis de la Sociedad de Tasación, la actividad inmobiliaria sigue concentrada en las capitales y principales ciudades gallegas.
En el caso de Asturias, observan que solo Gijón y Oviedo presentan «potencial» para desarrollar nuevas viviendas, mientras que en Cantabria la actividad residencial se está ralentizando y la oferta de vivienda disponible se está reduciendo.
En cambio, en el País Vasco la demanda de obra nueva sigue activa y los precios de mantienen estables y, en Navarra, hay una escasez de oferta y los precios de viviendas de segunda mano se están incrementando.
EFE