Miembros de las organizaciones ecologistas Futuro Vegetal y XR Ibiza, que luchan contra el cambio climático, han irrumpido a la hora de la cena en un beach club de Cala Jondal para denunciar «la incompatibilidad de sostener el estilo de vida de los mega-ricos y afrontar la Crisis Climática», informan en un comunicado.
Las activistas fueron desalojadas por el personal de seguridad e incluso una de ellas fue llevada en volandas por uno de los trabajadores del local, como muestra la imagen.
Las personas que entraron en el local portaban pancartas en las que se podía leer “Jets Privados y Mega Yates = Inusticia Climática + Energética”, «You Consume Others Suffer» (consumís el sufrimiento ajeno) y “Your Luxury, Our Climate Crisis” (vuestro lujo, nuestra Crisis Climática).
Una de las activistas pintó en una de las paredes del local el ya conocido lema «+1.5º», en referencia al límite de aumento de temperatura marcado por el acuerdo de París y que todo apunta a que se superará esta década.
La acción forma parte de la campaña “Jets and yachts, the party’s over”, convocada por la plataforma “Eivissa Es Rebel·la”, compuesta por distintas organizaciones climáticas locales y que pretende concentrar esta semana actividades contra el turismo de lujo que genera una gran contaminación, según explican y demuestran estudios relacionados, por ejemplo, con el uso de jets privados frente a la aviación comercial.
La campaña exige la prohibición de jets privados y la eliminación de lo que llaman las emisiones de lujo.
En el comunicado que Futuro Vegetal ha compartido en sus redes, el colectivo afirma que “en un contexto de Crisis Climática, las emisiones de lujo de los mega-ricos son las primeras que debemos frenar. No podemos permitir que un estilo de vida desenfrenado de una minoría imponga el caos climático al resto de la población”.
Una portavoz de ambos colectivos señalaba: “estamos sufriendo eventos climáticos extremos sin precedentes que van a empeorar. Necesitamos una reducción inmediata de emisiones si queremos evitar los peores escenarios, pero en Ibiza se sigue promoviendo un estilo de vida que está destruyendo el planeta y la vida de millones de humanos y otros animales. Seguir este modelo implica no poder cultivar nuestro propio alimento”..
Tenemos un verdadero problema con el cambio climático. Negarlo es de idiotas. El turismo de masa, la masificacion de las ciudades y el consumo irresponsable no contribuyen mucho.