El departamento del Medio Ambiente del Ayuntamiento de Santa Eulària ha realizado una campaña contra la procesionaria del pino (thaumetopoea pityocampa) en los núcleos urbanos del municipio, después de que se hayan detectado diferentes ejemplares gracias a la colaboración ciudadana mediante la aplicación Línea Verde.
Después de la solicitud a la conselleria de Medio Ambiente, se han instalado 100 trampas de feromona en espacios verdes y equipamientos públicos, en colaboración con el IBANAT y el servicio de Sanidad Forestal del Govern balear.
Para dar solución al incremento de bolsas, en el último año se instalaron hasta 57 cajas refugio en el municipio para favorecer así la presencia de quirópteros, el depredador natural de la ‘thaumetopoea pityocampa’, actuaciones georreferenciadas dentro de las acciones previstas frente a la plaga de procesionaria en Santa Eulària, explican desde el Consistorio en una nota.
La procesionaria del pino es un insecto defoliador que se alimenta mayoritariamente de las acículas del árbol hasta debilitarlos, favoreciendo su vulnerabilidad frente a otros agentes como la sequía u otros insectos escolítidos. Además, es conocida la capacidad de la procesionaria en generar daños tanto a las personas como a los animales tras el contacto con sus pelos urticantes.
Este insecto se detectó por primera vez en 1975 y, pese a estar extendida, no se declaró foco incipiente de plaga hasta el año 2021 en el sector de la zona nordeste de Ibiza, en los municipios de Santa Eulària y Sant Joan.