El presidente del Tribunal Superior de Justicia de Baleares (TSJIB), Carlos Gómez, ha reclamado este miércoles la creación de 27 plazas para jueces en las islas y mejoras en el plus de insularidad, con el fin de que los funcionarios y magistrados quieran trabajar en la comunidad.
En declaraciones a la prensa tras el acto de apertura del Año Judicial 2023-24, Gómez se ha referido a la falta de jueces en Baleares, ya que éstos deciden ir a otras regiones: «El problema es que se tienen que crear nuevas plazas judiciales, un problema es que los jueces no quieran venir y otro que no haya puestos para los jueces».
Gómez ha destacado el compromiso de los jueces con la ciudadanía y ha criticado las deficiencias que corresponden a estos profesionales, así como a otros poderes, dado que «el poder legislativo nos tiene que dar leyes modernas y el ejecutivo nos tiene que dotar de los medios materiales y personales que necesitamos».
Entre otras cuestiones, Gómez ha insistido en la importancia de desbloquear la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) porque «afecta directamente a este tribunal, ya que tenemos vacantes desde hace mucho tiempo».
El presidente del TSJIB también ha reivindicado un esfuerzo presupuestario contenido «para que lleguemos a tener edificios judiciales así como toca».
Durante su discurso en el acto de apertura del Año Judicial, ante las autoridades institucionales de las islas, Gómez ha destacado las inversiones importantes en los edificios judiciales de Ibiza e Inca, si bien ha lamentado que la Administración de Justicia no se haya beneficiado de un impulso de inversión como ha sucedido en otros ámbitos, como la educación y la sanidad.
«No hay democracia sin garantía de derechos», ha hecho hincapié el presidente del TSJIB, quien ha censurado la situación «frágil» que vive la Administración de Justicia, con un órgano de gobierno que considera «debilitado» y con una ratio de jueces de 11,9 por cada 100.000 habitantes, lejos de la media europea, que alcanza los 20.
Además, ha pedido un aumento del complemento de insularidad de modo que funcionarios y jueces puedan venir a Baleares y que vuelva a ser un destino deseable. «Ahora no lo es», ha opinado.
Gómez ha mencionado algunos de los datos que recoge la memoria judicial de 2022. «Hemos sido productivos, ya que hemos reducido en un 10 % los casos pendientes, pero como han entrado un 17 % más de asuntos, la tendencia ha aumentado, lo que resulta un tanto frustrante», ha afirmado.
Ha reiterado su preocupación «máxima» por la «grave» situación en la que se encuentra la Administración de Justicia, por la «histórica» falta de medios materiales y personales. «Ya hay señalamientos a tres años vista», ha comentado.
Gómez también ha afirmado que, en algunos casos, la respuesta judicial «llega demasiado tarde», como cuando una sentencia llega cuando es imposible reparar una familia, cuando una niña abusada ya es adulta y tiene que revivir ese episodio, o cuando la víctima de violencia machista ya ha rehecho su vida.
EFE