¿Son los teléfonos móviles los causantes de que la fiesta de Ibiza haya perdido su magia y su espontaneidad? Esta es la pregunta que se están haciendo muchos internautas y clubbers tras este verano, a la vista de los estragos que estos aparatos están causando en las pistas de discotecas y beach clubs.
Por una parte, la privacidad se pierde por completo ya que cualquiera puede grabar a cualquiera en cualquier situación. Es decir, un baile gracioso o desenfrenado, un momento apasionado con un/a desconocido/a, o bien una actitud desorientada por haber consumido alcohol o drogas pueden acabar protagonizando una escena viral, como la que aparece bajo estas líneas y que lleva millones de reproducciones en diferentes redes sociales.
En ella se ve a un hombre desorientado, presuntamente por el consumo de alguna sustancia, y varias personas que le graban y le hacen corrillo.
What have we become? A generation of weirdos pointing and laughing at people enjoying their life. Put your phones down and get trollied with him. Horrible this. pic.twitter.com/iQMSCrLyOw
— Plink2 (@plinketyplink2) October 5, 2023
Lo cierto es que muchos locales de ocio del todo el mundo, empezando por las más míticas salas berlinesas, no permiten el uso del móvil. Incluso echan del local al infractor de turno si le ven sacando fotos y dan pegatinas para ‘cegar’ las lentes de la cámara al entrar. Es una forma de guardar el misterio de lo que sucede en su interior, pero también de preservar la privacidad de las personas que están pasándoselo bien en total libertad y que no tienen por qué ser fotografiadas, filmadas y mucho menos acabar en una red social de alcance global.
Es más, en muchas fiestas ilegales de Ibiza que se celebraban en mansiones o chalets en zonas apartadas durante la pandemia de Covid no estaba permitido usar móvil e incluso sellaban la cámara con una pegatina o una especie de lacre. Una costumbre que se ha seguido dando en algunas de ellas pero en este caso para evitar ser localizadas en redes sociales por las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado o por los ayuntamientos o el Consell.
Nadie baila en la pista de baile
Otro de los problemas evidentes que está suponiendo la presencia masiva de smartphones en las discotecas de Ibiza es que las pistas centrales, en lugar de ser el escenario del baile desenfrenado y la diversión del ocio nocturno (o diurno), se han convertido en lugares desde donde grabarlo todo y todo el tiempo, con lo que la energía del lugar cambia por completo. Ya no prima la diversión genuina y el relax sino el postureo en redes sociales.
@afterlife_ofc @Hï Ibiza @Tale Of Us #Afterlife #NewMusic #Ibiza #ElectronicMusic ♬ original sound – Afterlife
@polmoratalla #davidguetta #ibiza #ibiza2022 #summer #ushuaia @davidguetta ♬ sonido original – Mura98
Y es que en las fiestas de determinados artistas, lo que más se ve en la pista son los brazos alzados de los clubbers, pero no para bailar sino para sostener sus teléfonos móviles.
Estos vídeos contrastan con otros de la fiesta en Ibiza a principios y finales de los años 90, cuando no existían (o apenas habían irrumpido) los teléfonos móviles. Las discotecas se ven llenas de gente bailando e interactuando.
Este tema se ha convertido en un interesante debate en redes sociales, con muchas personas a favor de la prohibición de los dispositivos en el interior de los locales para preservar una cierta privacidad entre los presentes y para no arruinar el ambiente de la fiesta.
Mientras se abre este debate, las discotecas de Ibiza preparan sus cierres. Este fin de semana se concentran parte de ellos y la traca final está prevista para el fin de semana del 14 al 15 de octubre.