El Ayuntamiento de Sant Antoni ha asegurado hoy que está «trabajando en base a lo que marca la normativa correspondiente, respetando el procedimiento y plazos existentes», en relación a un presunto caso de maltrato animal denunciado por la Fundación Contra Maltrato Animal, que asegura en sus redes sociales que una perra «rescatada de una vivienda donde pasaba horas desatendida» ha regresado de nuevo al domicilio y vive en condiciones «deplorables».
«El Ayuntamiento de Sant Antoni y demás autoridades competentes decidieron devolver al infierno a Lía. La condenaron a una vida de maltrato y soledad. Su situación no sólo no ha mejorado, sino que ahora es peor», explica la citada fundación a través de sus redes sociales, donde ha compartido un vídeo en el que se ve las condiciones en las que vive el animal.
Desde el Consistorio han explicado que los primeros hechos que pudieron ser constitutivos de denuncia ocurrieron en agosto de 2022, si bien de acuerdo con lo que marca la Ley 1/1992, de 8 de abril, de Protección de los Animales que viven en el entorno humano y los datos de los que disponía el Ayuntamiento, «no se pudo verificar» la existencia de «un maltrato al animal».
Sin embargo, han resaltado que sí se pudo actuar por la comisión de infracciones administrativas y por este motivo la perra fue retirado a su dueña. No obstante, han agregado que cuando las incidencias fueron resueltas, como por ejemplo la tramitación de la licencia para la tenencia de Perros Potencialmente Peligrosos (PPP) en febrero de 2023, el animal fue devuelto a su propietaria.
«Desde el momento en que se hizo entrega del animal, se han realizado varias inspecciones periódicas, ya sea por parte de los técnicos del Ayuntamiento como por parte de la Policía Local de Sant Antoni. En concreto, desde febrero de 2023 hasta el 10 de noviembre 2023 se han realizado cuatro inspecciones», han afirmado las citadas fuentes en un comunicado de prensa.
En las tres primeras inspecciones no se detectaron indicios de maltrato en el lugar ni tampoco indicios sancionables administrativamente, mientras que en la cuarta sí se comprobó «la colocación del bozal» y que el animal utiliza la terraza de la vivienda «como su espacio habitual».
«Con la entrada en vigor, el 29 de septiembre de 2023, de la nueva Ley 7/2023, de 28 de marzo, de Protección de los derechos y el bienestar de los animales, estas conductas están tipificadas como infracciones y desde el Ayuntamiento de Sant Antoni ya se está trabajando en la resolución de las mismas al amparo de la citada norma», han señalado y han agregado que se han incoado los correspondientes expedientes sancionadores.
Además, han añadido que el Ayuntamiento ha solicitado la colaboración de veterinarios funcionarios del Consell de Ibiza y que se está programando una quinta inspección con medios externos y con Policía Local «para constatar el estado en el que se encuentra el animal».
«De esta forma, el Ayuntamiento está realizando un seguimiento exhaustivo de este caso desde hace meses y tomando las medidas oportunas según la normativa vigente», han agregado.