El Ayuntamiento de Ibiza ha sido el primero de Baleares, y de los primeros de España, en crear el censo de amianto al que obliga la legislación vigente. La concejalía de Medio Ambiente del Consistorio de la Ciudad ha completado la digitalización del censo y calendario de retirada del amianto, con inteligencia artificial, en el municipio cumpliendo así con la ley 07/2022, del 8 de abril. El censo se puede consultar en el siguiente enlace: https://censo.agforest.ai/locality/7026?embedded=true
“Eivissa, la capital de la isla, se encuentra a la vanguardia del cumplimiento de la Ley 07/2022, siendo el Ayuntamiento de la Ciudad pionero en la elaboración de un censo preliminar de amianto mediante el empleo de técnicas de teledetección e inteligencia artificial. Concretamente, se ha dispuesto un censo detallado de todas las cubiertas que contienen amianto en el territorio municipal, estableciendo, además, la fecha de retirada recomendada para cada uno de los elementos detectados, demostrando nuestro compromiso con la seguridad y el bienestar de nuestros ciudadanos”, ha explicado el cuarto teniente de alcalde y concejal de Medio Ambiente y Limpieza, Jordi Grivé, durante la rueda de prensa celebrada este lunes en Can Botino, donde ha señalado que solo dos edificios de los 400 detectados con presencia de amianto son de titularidad municipal y su retirada debe llevarse a cabo antes de 2028. En concreto, los edificios públicos con amianto son el Mercat Nou y el Mercat Pagès.
La concejalía de Medio Ambiente contrató este censo al equipo de Bureau Veritas y Agforest, con un coste de unos 6.000 euros (sin IVA), empresa que ha proporcionado la información necesaria sobre la situación del municipio de Eivissa frente al problema del amianto. Los resultados del estudio reflejan que, del total de 3.072 edificaciones catastradas en el municipio, únicamente en 400 se han detectado cubiertas de fibrocemento con amianto. Esta cifra supone el 13% de las construcciones del municipio, o lo que es lo mismo, un 4,07% de la superficie construida. Cifras por debajo de la media nacional. Con respecto al total de edificaciones con cubiertas de amianto detectadas, la mayoría, el 58,25% son consideradas de uso residencial, seguido de lejos por el uso industrial con un 21,5%, de las cuales, su gran mayoría fueron construidas en la década de los 70.
Para la elaboración del censo se han utilizado imágenes satelitales de alta resolución y herramientas personalizadas de teledetección e inteligencia artificial de una empresa especializada en el sector (Bureau Veritas). Esta empresa ha desarrollado un método para localizar estas estructuras de manera no invasiva. Incluyendo, además, trabajos de campo para validación de datos mediante inspecciones visuales, asegurando unos resultados fiables. Una vez realizado el censo, se ha planificado el calendario de retirada estableciendo prioridades en función del riesgo potencial y grado de peligrosidad de las instalaciones, de su gestión (edificio público o privado), de su uso, de la exposición de población
Un censo de amianto consiste en un inventario de instalaciones y emplazamientos que contengan materiales con amianto en una determinada zona. Este censo debe tener carácter público y debe ser enviado a las autoridades sanitarias, medioambientales y laborales competentes de las comunidades autónomas. Además, es necesario establecer un calendario que planifique su retirada para que, a través de él, las entidades competentes de cada Comunidad Autónoma puedan coordinarse con las empresas de retirada de amianto para su completa eliminación.
Material perjudicial para la salud
El amianto es un material conocido en la actualidad por ser perjudicial para la salud humana, provocando más de 88.000 muertes al año en Europa. Sin embargo, en la segunda mitad del siglo XIX, fue un material muy popular en el sector de la construcción por su bajo coste, fácil manejo y buena durabilidad, por ello, a día de hoy, podemos encontrar fibras de asbesto en multitud de elementos como tejados, tuberías, bajantes, depósitos, etcétera.
20 años después de prohibirse en Europa la comercialización y uso del amianto como material de construcción, se ha aprobado la Ley 7/2022, de 8 de abril, de residuos y suelos contaminados para una economía circular, en la que se obliga a las administraciones públicas no solo a realizar un censo de instalaciones y emplazamientos con amianto, sino a acometer la gestión de este en edificaciones de titularidad pública antes de 2028.