Un despiste a la hora de cambiar de carril en la carretera E-20, cerca de Blanca Dona, hizo perder el control del vehículo y acabar volcado con las cuatro ruedas hacia arriba a un conductor ayer sobre las siete y media de la tarde. A pesar de lo aparatoso del accidente, el único ocupante del coche no sufrió heridas de consideración. Un equipo de Grúas Ibiza se encargó de levantar y trasladar el coche accidentado, como se aprecia en la imagen que acompaña estas líneas, mientras la Guardia Civil iniciaba la investigación sobre lo sucedido.
Este es el segundo accidente de tráfico relevante que se ha producido en Ibiza durante este puente de Semana Santa. El otro tuvo lugar la noche del sábado, cuando un conductor se salía de la vía, impactaba contra un árbol y su vehículo empezaba a arder casi súbitamente. Por fortuna, pudo salir del coche por sus propios medios para ponerse a salvo. Fue necesaria la intervención de los bomberos de Ibiza.