Unas obras de reparación que está realizando Aqualia en la zona del barrio de Can Guasch de Santa Eulària provocaron ayer la rotura de una tubería antigua, que no estaba en los planos, según indica el Ayuntamiento.
En el interior de la tubería había agua estancada, que llevaba allí unos diez años, con lo que al picar y romperla se ha generado un vertido pestilente, tal y como denuncian vecinos a Noudiari.
El Consistorio subraya que no se trata de aguas fecales sino de aguas estancadas en esta tubería ya en desuso y que hoy ya no se están produciendo más vertidos.
Las obras de reparación de canalizaciones por parte de Aqualia en esta calle ya fueron anunciadas en redes sociales el pasado miércoles por parte del Ayuntamiento, ya que necesitaban cortar el tráfico rodado por la mañana.