El Govern balear defiende la derogación de la Ley de Memoria Democrática autonómica porque «hay una parte de las víctimas que no se tienen en cuenta», según ha asegurado este viernes su portavoz, el ibicenco Toni Costa.
Costa ha asegurado en la rueda de prensa posterior al Consell de Govern que la ley se eliminará porque «se impuso a instancia de parte» y ha remarcado que, sin embargo, se mantendrá la Ley de Fosas, que ampara la búsqueda y exhumación de víctimas de la Guerra Civil y el franquismo porque si se aprobó con un amplio consenso.
«En su momento votamos en contra», ha dicho el portavoz del Govern respecto a la postura del PP cuando la Ley de Memoria Democrática se aprobó en el Parlament en marzo de 2018.
No obstante, entonces el grupo del PP sí dio su visto bueno a buena parte del articulado de la ley, aunque abogó por no utilizar la Guerra Civil para la disputa partidista y para tratar de imponer una visión sesgada de la historia.
Su portavoz en aquel debate, el actual conseller del Mar, Juan Manuel Lafuente, agradeció precisamente que se hubieran aceptado enmiendas al texto de la ley para reconocer a «todas las víctimas», sin «distinguir» a las de una u otro bando: «Los muertos son de todos y forman parte de nuestra historia», defendió entonces.
Seis años después, Costa ha hecho hincapié en que «no se apostó por la línea del consenso» y ha remarcado que el PP cumplirá su compromiso con Vox y votará la supresión de la ley: «Somos gente de palabra». EFE
Y el rosco de la agenda 2030 que no falte, la foto habla por sí sola
Y porque no olvidamos ya la memoria histérica, si he dicho histérica.