El Ayuntamiento de Sant Josep de sa Talaia informa que la última Junta de Gobierno, celebrada el pasado 5 de abril, ha aprobado iniciar el proceso de caducidad de la obra inacabada de Punta Xinxó que durante años ha supuesto una anomalía urbanística que afecta la zona de Cala de Bou.
El alcalde del municipio, Vicente Roig, ha declarado que «la voluntad del consistorio es aclarar la situación de este complejo que actualmente se encuentra en una situación lamentable, suponiendo para el entorno un foco de inseguridad, insalubridad y efectos nocivos».
«Y es que la máxima prioridad del equipo de gobierno de Sant Josep es dar salida a este tipo de construcciones que durante años han estado paralizadas y cuya ejecución es clave para reactivar las áreas donde se sitúan«, destaca el Consistorio.
De hecho, la colaboración de la administración con propiedades en situaciones similares está haciendo que algunas de ellas, como la situada entre las calles de Ávila y Badajoz, «se hayan reactivado suponiendo para la zona una importante mejora, que ha repercutido sobre todo en la accesibilidad, a través de la renovación de pavimentos y aceras. Igualmente destacable es el hecho de que esto revertirá también en la creación de nuevos hogares», añaden.
«El gobierno del Ayuntamiento de Sant Josep seguirá con la misma línea de actuación, respetando siempre los preceptos de la propiedad privada y el interés general», ha defendido Roig.
Esto huele a pelotazo