Los macrófitos marinos alóctonos, que son macroalgas y plantas marinas no nativas de origen tropical, se están extendiendo en el mar Mediterráneo a una velocidad mucho mayor que los macrófitos marinos de origen templado durante las últimas décadas.
Así lo detallado un estudio internacional liderado por el Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados (IMEDEA-CSIC-UIB), el centro mixto del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Universidad de las Islas Baleares (UIB).
Los resultados de este trabajo, que se publica en la revista Global Change Biology, sugieren que el futuro calentamiento del Mediterráneo podría seguir favoreciendo la expansión de estas especies, como ha informado IMEDEA en una nota.
Los investigadores han señalado que, durante los últimos dos siglos, se ha registrado un incremento en la temperatura del mar debido al cambio climático y que, no obstante, persiste la incertidumbre sobre si este aumento de temperatura realmente favorece la expansión y el impacto de especies invasoras en el mar Mediterráneo.
El Mediterráneo, como recoge este estudio, se ha convertido en un punto crítico para la llegada de especies alóctonas, aquellas que han sido trasladadas más allá de su rango de distribución nativo debido a actividades humanas, debido a las extensas rutas marítimas que conectan el Atlántico con los océanos Índico y Pacífico, así como la apertura del canal de Suez.
Estos dos factores, confirman los investigadores, han propiciado que los macrófitos marinos, que engloban tanto macroalgas como fanerógamas marinas, se conviertan en uno de los grupos taxonómicos más abundantes de especies alóctonas en el mar Mediterráneo.
Su adaptabilidad a las condiciones cambiantes y su capacidad para colonizar nuevos hábitats han contribuido significativamente a su expansión en esta región.
Dos siglos de observaciones
En el estudio, el equipo investigador recopiló observaciones de la presencia de macrófitos marinos alóctonos en el mar Mediterráneo de los últimos dos siglos. Calcularon sus tasas de expansión a lo largo del tiempo y la relación entre estas tasas de expansión y las condiciones térmicas de las especies en el rango de distribución.
“Los resultados indican que las velocidades de invasión han aumentado a lo largo del tiempo, y que desde la década de 1990 especialmente se han acelerado las de las especies tropicales y subtropicales, superando las de los macrófitos templados y cosmopolitas”, ha comentado Marlene Wesselmann, investigadora del IMEDEA y primera autora del trabajo.
“En particular, las velocidades de expansión más altas se han observado en macrófitos alóctonos que se encuentran expuestos a temperaturas mínimas de 2 a 3 grados centígrados más altas en su rango nativo que en el mar Mediterráneo”, ha añadido Wesselmann.
“Comparamos la temperatura del agua a la que estas especies se encuentran expuestas en su rango nativo con la temperatura a la que se encuentran expuestas en el mar Mediterráneo, y observamos que la mayoría de estas especies experimentan temperaturas mínimas considerablemente más bajas en el Mediterráneo que en su rango nativo”, ha explicado Núria Marbà, también científica del IMEDEA.
Esto indica, en palabras de Marbà, que la mayoría de estas especies tropicales y subtropicales no están limitadas por las temperaturas invernales más frías del mar Mediterráneo y que, junto con el aumento de la temperatura de esta mar en las últimas décadas, puede haber mejorado las condiciones térmicas para su crecimiento y expansión.
EFE