EFE / La consellera de Vivienda, Territorio y Movilidad, Marta Vidal, ha explicado que con el programa ‘Lloguer segur’ que esperan aprobar en cuestión de semanas, será el Govern el que actúe como arrendador, dando la garantía a los propietarios al pagarles el alquiler y asegurarse de que reciban el piso en las mismas condiciones.
«Después, lo que haremos será subarrendar estos pisos a gente de clase media, ofreciéndoles el alquiler a un precio más bajo», ha añadido Vidal, en declaraciones a los medios previas a su comparecencia en el Parlament para explicar los fundamentos de este programa que prepara el Govern.
«Tenemos una estimación de que los alquileres que ofrezcamos sean un 30% inferiores al precio de mercado para el destinatario», ha explicado la consellera, que ha indicado que la idea es que el Govern asuma la diferencia de precio.
Para poder acogerse a este programa, las viviendas deben llevar al menos seis meses cerradas, no ser de nueva construcción (tener al menos tres años), tampoco pueden pertenecer a grandes tenedores.
En cuanto a los requisitos para los destinatarios, tienen que ser residentes en Baleares, usarlo como primera vivienda, tienen que estar empadronados en el piso que alquilan y cumplir unos requisitos de renta que se establecen en función del domicilio, ha indicado Vidal.
La tramitación del arrendamiento no la llevará a cabo el Govern. «No nos podemos poner a gestionar los alquileres, lo que hacemos es firmar un convenio con los colegios de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria y de Administradores de Fincas, que son los que harán las selección de los inquilinos a partir de los requisitos del programa, la gestión de los seguros, las gestiones en caso de impago y de selección de nuevo inquilino y las gestiones de acondicionamiento del piso en el momento que vuelva a quedar vacío».
«Lo que pretendemos es que aflore gran parte de este número de viviendas vacías que hay en Baleares, que según el INE pueden ser hasta 100.000, porque creemos que falta confianza de estos propietarios de ofrecer estas viviendas en alquiler por un problema de posibles impagos o porque después los inquilinos no dejan el piso en las condiciones adecuadas», ha asegurado.
Eso provoca «que estén cerrados o que se dediquen ilegalmente a alquiler turístico», ha señalado.
Vidal ha defendido que esperan que este programa provoque «un efecto colateral importante», al sacar al mercado del alquiler un porcentaje de los pisos vacíos que ahora mismo están cerrados. «Estamos hablando de miles de pisos que harán que se destense el mercado», ha afirmado la consellera que ha defendido que con este sistema lo que se pone en marcha son «con medidas de fomento».
Ha subrayado que el programa «es temporal, para hacer aflorar un número importante de viviendas y para generar este marco de confianza en pisos que lleven mucho tiempo vacíos».
El Govern ultima el lanzamiento de este plan para sacar al mercado viviendas vacías debido a la prevención o temor de los propietarios ante los abusos e inseguridad como impagos o casos de okupas o ‘inquiokupas’ que después no pueden ser desalojados al acogerse a la situación de vulnerabilidad prevista en la ley estatal.
Pretende aumentar la oferta de viviendas a precios accesibles aprovechando pisos ya existentes y vacíos, eliminando la incertidumbre de los propietarios ante la posibilidad de impago. Prevén ponerlo en marcha este año y que esté vigente 2 años.
Con este plan, la administración autonómica captará las viviendas vacías a sus propietarios, garantizando el cobro de las cuotas de alquiler a precios de mercado y garantizando la devolución de los inmuebles en el mismo estado que aquel en el que se captaron, a la vez que se ofrecerán estas viviendas en el mercado a precios accesibles.
El objetivo de este programa es que estas viviendas sean accesibles a los demandantes de alquiler jóvenes y familias principalmente de clase media que en la actualidad no pueden asumir el coste de un alquiler de mercado.