Tan sólo el 16,4 % de los jóvenes menores de 30 años en Baleares estaban emancipados en el primer semestre de 2023, 1,07 puntos porcentuales menos que el año anterior, con una tendencia similar a la media nacional, del 16,3%.
Así lo refleja el balance sobre las condiciones de emancipación de la población joven de las islas que ha dado a conocer este miércoles el Consejo de Juventud en una rueda de prensa en Palma, y que sitúa al archipiélago como la sexta comunidad con el mayor porcentaje de personas jóvenes emancipadas.
La bajada de la tasa de emancipación en las islas se produjo en un contexto de subidas fuertes de los precios en el mercado inmobiliario de las islas, donde los precios se dispararon un 27,1 %, siendo el coste del alquiler más caro del país, con un coste medio de 1.312 euros, como ha explicado la presidenta del Consejo de la Juventud de España, Andrea Henry.
Henry ha advertido que los salarios también subieron en las islas, en torno a un 4 %, pero menos que los alquileres, y que se trata de un gasto al que los jóvenes deben destinar un 112,2 % de su sueldo neto, por lo que, ni tan solo destinando todo su sueldo, una persona joven podría vivir sola en Baleares.
Sobre este último punto, para poder hacerlo sin sobreendeutarse, un joven debería cobrar 52.480 euros netos al año, más del triple de la media salarial de los jóvenes en el archipiélago, como precisa el informe. También supone un problema el alto coste del alquiler de una habitación, de unos 400 euros en Palma, que es 20 euros más que el último semestre de 2022.
Además de las dificultades para acceder a un alquiler de la vivienda, los jóvenes baleares también afrontan las trabas para comprar un inmueble. Así, en las islas el precio de entrada de un piso representaba 6,2 años el salario neto anual de un joven, superior a la media nacional, de alrededor de cuatro años íntegros.
Durante los primeros seis meses de 2023, las viviendas en régimen de compraventa se encarecieron un 9,1 %, un coste que supone destinar 20,4 años del salario íntegro de un joven que resida en Baleares, con un coste medio de 286.990 euros, de acuerdo con este informe.
Por su parte, el presidente del Consell de la Joventut de Baleares, Pau Emili Muñoz, ha indicado que el 31,8 % de las personas jóvenes con trabajo en las islas el primer semestre de 2023 también estudiaban, que son 3,7 puntos porcentuales más que el anterior periodo.
También se ha referido a que los contratos indefinidos en personas jóvenes se han incrementado, si bien ha alertado de que se han duplicado los contratos de fijos discontinuos, ya que muchos jóvenes trabajan durante la temporada alta en Baleares.
En cuanto al porcentaje de jóvenes trabajadores que estaban contratados menos horas en su puesto de trabajo que personas en puestos similares, pese a que estuvieran dispuestas a ampliar la jornada laboral, ha dicho que éste afectaba a uno de cada diez jóvenes en las islas.
Riesgo de pobreza monetaria
En Baleares, el 15,6 % de los jóvenes residentes en Baleares estaba en riesgo de pobreza monetaria, en hogares con falta de materiales o viviendas con baja intensidad en el trabajo.
El balance de este Observatorio apunta también que la inflación interanual subió solo un 2,6 % en las islas, por lo que, junto con la subida de salarios del 4,9 %, eso hizo que los jóvenes trabajadores de las islas ganasen un 2,6 % de poder adquisitivo, a precios de 2006.
Muñoz, que ha alertado sobre el panorama «poco esperanzador» y la situación «muy grave» en la comunidad, ha comentado que el salario neto de los jóvenes es 2.080 euros mayor que el de las jóvenes en Baleares.
Desde el Consejo de Juventud de España han insistido en que en el país hay una ley de vivienda aprobada que «no esta siendo ejecutada». Por ello, Henry ha pedido que se ponga como prioridad solucionar el problema de la vivienda con un pacto de Estado pensando a largo plazo.
Los expertos han hecho hincapié también en la necesidad de regular el precio de la vivienda, tanto en Baleares como en el país, así como revisar el bono del alquiler joven, que tan solo llega a un 1 % de la población joven en España.
«Necesitamos que esta sea la legislatura de la vivienda y que se busque un consenso en la ley de la vivienda, con algo tan básico como la vivienda. Hay que solucionar una situación crítica», ha aseverado Henry, que ha tendido la mano a las autoridades estatales y autonómicas para «mejorar la vida de las personas jóvenes, escuchar, dialogar y actuar».
EFE