Diversas entidades de Ibiza y Formentera han decidido unir sus fuerzas para organizar protestas «contra el actual modelo turístico y sus nefastas consecuencias». «Estamos empezando a elaborar una agenda conjunta de acciones de denuncia y un llamamiento a la movilización. Necesitamos encarar un diálogo sobre nuestro modelo económico y redefinir nuestras prioridades en pro del bien común y del buen vivir», han indicado en un comunicado de prensa.
Som Energia Eivissa, Eivissa Es Planta, Kesti Klab, Taller de músicas, Institut d’Estudis Eivissencs, Gen-Gob Eivissa, Amics de la Terra, Sindicato de Inquilinas d’Eivissa, Emprendada Feminista, Dones Progresistes d’Eivissa, Associació Nybia Eivissa, Plataforma Pensionista Pitiusa, La Utòpica, Extinction Rebellion Ibiza, Associació de Festes de Santa Maria i Festival Qué Celeste Formentera son las 16 entidades que forman parte de la iniciativa.
«Queremos denunciar que el actual modelo de desarrollo turístico expansivo en todo el territorio, basado en un crecimiento continuo, está provocando un deterioro en las condiciones de vida de la gente, los recursos y el entorno natural», han señalado las citadas fuentes, que han agregado que dicho deterioro afecta «a todos los residentes, pero de manera más dramática a las personas y colectivos más vulnerables».
En este sentido, han incidido en que derechos fundamentales como el derecho a la vivienda o a los servicios sociales, especialmente a la sanidad y a la educación, «están en juego», al tiempo que recursos naturales como el agua, el mar, las playas y los espacios naturales se han convertido «en bienes especulativos».
«Concebir nuestras islas como un destino turístico para personas con alto poder adquisitivo tiene consecuencias desproporcionadas y negativas. Lejos de sufrir las molestias que afectan a los residentes trabajadores, estos visitantes, que cuentan con mansiones y yates de lujo, se trasladan en aviones privados y helicópteros, evitando los problemas de la masificación», han apuntado.
Además, han señalado que este estilo de vida «acelera el cambio climático y la destrucción de las Pitiusas a un ritmo demencial», lo que ha provocado «que surjan las voces de alarma por el impacto social y ambiental». «El 1% más rico emite tantos gases de efecto invernadero como el 66% más pobre de la humanidad. Una injusticia ya que, una vez más, las comunidades más vulnerables son las que sufren y sufrirán más las consecuencias de la crisis climática», han añadido.
Para las entidades firmantes, si a esos impactos se suma la presión urbanística acelerada sobre el territorio, la pérdida de biodiversidad, la degradación y la destrucción del entorno para favorecer un crecimiento económico que sólo beneficia a unos pocos a costa del empobrecimiento general, la sociedad se ve abocada «a un futuro incierto y preocupante».
«Vulneración sistemática y crónica del derecho a la vivienda»
«Especialmente preocupante cuando constatamos cómo la gentrificación extrema y la ‘Marca Ibiza’ nos han llevado a una vulneración sistemática y crónica del derecho a la vivienda», han subrayado.
Así, han incidido en que «el actual modelo turístico depredador, de la mano de grandes y pequeños propietarios, inmobiliarias y fondos voltor», han reducido el parque de vivienda familiar, convirtiéndolo en turístico, «legal o ilegal».
«Eso, entre otras causas, ha provocado una escalada exponencial de los precios de los alquileres llevando, en consecuencia, a la población residente de Ibiza y Formentera a una situación dramática. Cada vez más familias se están viendo forzadas a vivir indignamente amontonadas en habitaciones individuales, a mudarse a caravanas, coches y tiendas de campaña o, directamente, a abandonar las islas», han apuntado.
Esto supone, han continuado, «un grave empobrecimiento de la población local» y a largo plazo su sustitución por otra de mayor nivel adquisitivo. «Todo eso ante la mirada pasiva de las instituciones que no han activado ni uno de los mecanismos existentes para poner remedio a esta situación», han denunciado.
Asimismo, el colectivo de entidades ha hecho especial hincapié en la incidencia de esta situación en las personas más vulnerables, como migrantes o mujeres monomarentales, un colectivo este último en el que la incidencia de desahucios es «muy superior» al que se da en al resto de segmentos sociales.
«La crisis de la vivienda que se vive en Ibiza y Formentera, además, es uno de los principales factores que retiene a muchas mujeres en relaciones de abuso y violencia. Si sumamos a esta situación la brecha de género en los salarios y en las pensiones, la injusticia inherente a nuestro sistema económico perjudica a las mujeres como principales sostenedoras de los cuidados», han agregado.
Del mismo modo, han resaltado que la precariedad provocada por el actual modelo «se extiende a la salud mental de los niños y jóvenes» que deben pasar largas jornadas laborales separados de sus padres durante la temporada turística, lo que propicia «una mayor vulnerabilidad y fragilidad en sus relaciones de afecto».
«Todos estos datos y preocupaciones son los que han motivado a diferentes movimientos sociales de Ibiza y Formentera a unirnos por una hoja de ruta encaminada a un necesario decrecimiento», han concluido.
Contar con mi apoyo y ayuda. Cualquier cosa que se haga por el bien de la sociedad en la que vivimos puede contar conmigo.
Y lo más derisa que dingun político. Dimite
Que levanten la mano las instituciones que participan en la movilización y que no acepten subvenciones públicas (incluyo a la prensa que le pueda dar voz).
https://www.youtube.com/watch?v=pE8mu3gx8Fc
«Hace falta que cuando cuando se acaben los ayuntamientos del cambio, hayan asociaciones de vecinos saludables…. tejido asociativo para que cuando haya que emprender de nuevo la batalla, la emprendamos en condiciones.»