Un Guardia Civil perteneciente al Puesto de Sant Antoni de Portmany que se encontraba en su día de descanso detuvo la pasada semana a un hombre al que sorprendió sustrayendo el teléfono móvil de una bañista en la playa de Cala Alto.
El agente observó al ahora detenido aproximarse sigilosamente al lugar donde se encontraban las pertenencias de una mujer para apoderarse del teléfono en un momento de descuido de la misma.
Tras observar la dirección de huida del autor, el guardia civil lo interceptó en los exteriores de la Cala, donde procedió a su detención tras identificarse como agente de la autoridad, logrando recuperar el dispositivo móvil.
Durante la detención, el autor se resistió de manera activa, llegando a causar lesiones leves al agente.
La Guardia Civil de Sant Antoni continúa con las indagaciones al tener ciertas evidencias de que el detenido podría estar implicado en más delitos contra el patrimonio perpetrados en el mismo municipio.