La Guardia Civil detuvo el pasado día 26 al entrenador de un equipo de futbol por un presunto delito de lesiones al haber agredido al entrenador del equipo rival.
Los hechos ocurrieron el pasado fin de semana, mientras se disputaba un artido de futbol entre dos equipos de categoría cadete en el campo de fútbol de Llucmajor, donde se requirió la presencia de la Guardia Civil por una supuesta pelea multitudinaria.
Al parecer, al término del partido, los jugadores de uno de los equipos se acercaron a la grada increpando a la hinchada rival. Ante tal hecho, el entrenador del intentó alejarlos, llevándolos a su campo para que no alterara a los aficionados.
Fue entonces cuando uno de los jugadores empujó a este, que cayó bruscamente al suelo y, estando en el suelo, el técnico del conjunto contrario le propinó una fuerte patada en la cara, provocándole un gran hematoma y fracturándole la nariz.
Una vez que los agentes se entrevistaron con ambos entrenadores, el presunto agresor manifestó que tener constancia sdel alcance de las lesiones que había producido al preparador del otro club.
Tras ser informados del procedimiento a seguir y haber realizado la correspondiente denuncia, el presunto agresor fue detenido por un supuesto delito de lesiones.