Un total de 1.416 firmas y un escrito de protesta elevado a todas las administraciones es el paso que han tomado los vecinos y vecinas contra el proyecto de explotación de la cantera de s’Espartar, ubicada en un paraje natural de gran valor ecológico y paisajístico situado a la Serra Grossa de la zona des Fornàs (Sant Antoni).
Así, el reinicio de la tramitación de la Pedrera S’Espartar, promovida por Can Escandell S.L., ha puesto en alerta a la Asociación de Vecinos de la Venda de Fornàs, que ha registrado este fin de semana «las primeras 1.416 firmas» dirigidas al Ayuntamiento de Sant Antoni, al Consell Insular de Ibiza y al Govern balear, «solicitando la denegación de la autorización que permitiría la explotación de los terrenos mencionados».
Esta iniciativa de recogida de firmas, como petición popular, se decidió el pasado 15 de noviembre en la Asamblea General Ordinaria, con una mayoría absoluta del 100 % de los socios asistentes, subrayan en un comunicado.
«Desde la Asociación de Vecinos pensamos que hay más motivos técnicos para denegar esta explotación que para autorizarla», afirman y recuerdan que «ya en el pasado contó con informes ambientales rotundamente desfavorables y que nada ha cambiado sobre el terreno para que cambie sobre el papel».
Texto de la carta vecinal que han hecho llegar a las autoridades:
«Hace casi nueve años nos constituimos como asociación vecinal para defender nuestro entorno más inmediato de un proyecto promovido por Red Eléctrica, que impulsaba una nueva línea desproporcionada paralela a otra ya existente, atravesando nuestra Venda.
El Govern de aquel momento podría haber ignorado nuestra demanda y evitar complicarse la vida con un trabajo tan arduo. Lejos de ello, nombró a un conseller, Marc Pons, para llevar este tema a buen puerto, y lo logró. Aquella idea de construir una línea desproporcionada por espacios altamente protegidos y posteriormente ampliar en un 400% la superficie de la subestación de Sant Agustí fue sustituida por el cambio de trazado hacia otra ruta, en soterrado, ampliando muy moderadamente dos subestaciones eléctricas (Sant Agustí y Sa Carroca), lejos de aquel 400% previsto en el proyecto inicial, minimizando todas las afecciones.
Fue una ecuación política perfecta, que dejó contentos no a uno, sino a dos vecindarios: Fornàs y Sant Agustí. Red Eléctrica también cumplió sus objetivos de mallar la red eléctrica de Ibiza para evitar caídas del suministro, sin costos adicionales.
A día de hoy, los Vecinos de Fornàs alzan la voz para defender una vez más el territorio que la pretendida cantera de S’Espartar quiere alterar con su actividad. No es comprensible que aquellos intereses generales, invocados en el pasado para otorgar estos grados de protección al territorio de nuestra comunidad autónoma, sean pisoteados en la actualidad por beneficios privados.
Se trata de un territorio catalogado como Lugar de Importancia Comunitaria (LIC, ES5310034) y conformado, en el macizo de Sa Serra Grossa, por un mosaico de figuras de protección que abarcan desde suelo rústico protegido (SRP), pasando por Áreas Naturales de Especial Interés (ANEI), Áreas Naturales de Especial Interés de Alto Nivel de Protección (AANP), hasta llegar a la máxima protección otorgada a nivel europeo como Área Natura 2000. Cada una de estas figuras de protección no actúa de forma aislada, sino que interactúan de manera combinada, dando lugar a un hábitat único en nuestra comunidad autónoma, que perdería el equilibrio natural del que hoy todavía disfruta si se autorizara la explotación de la cantera de S’Espartar.
Esta cantera ya intentó legalizarse en el siglo pasado por diferentes titulares, quienes perdieron los derechos de explotación. Nunca lograron obtener licencia municipal alguna ni pudieron comenzar la actividad extractiva, siempre enfrentándose a las alegaciones contrarias de vecinos y propietarios de los alrededores, así como a un informe ambiental rotundamente desfavorable por parte de las administraciones de aquel momento.
Cabe mencionar que el alto crecimiento de la isla de Ibiza ha ido desplazando hacia estas zonas protegidas, o su entorno más inmediato, infraestructuras necesarias y estructurales para nuestra sociedad, como la depuradora de Sa Coma, aunque otras no tan imprescindibles como el campo de motocross proyectado en la misma zona de Fornàs. También encontramos un depósito de agua para suministro de la ciudad de Ibiza en pleno corazón del llano central del Puig de Can Negre, o el centro de protección animal de Sa Coma ubicado junto al Torrente de Fornàs. Sin olvidar la actual cantera de Cas Capità, que ha consumido 17 hectáreas de territorio, explotada por la misma empresa Can Escandell que pretende esta nueva explotación de áridos.
Si observamos a nuestros vecinos de Cas Mut, vemos la misma dinámica con el cementerio municipal y, a pocos metros, la explotación de la cantera de Can Xumeu, consumiendo otras 17 hectáreas del pulmón verde central de la isla de Ibiza. Aunque estos últimos elementos no pertenecen a la Venda de Fornàs.
Finalmente, cabe destacar los nueve pozos de captación profunda situados habitualmente junto al Torrente de Fornàs o su prolongación en el Torrente de Ses Dones, que durante los últimos cuarenta años han abastecido a los núcleos de población, aunque a costa de la capacidad y estado de los acuíferos, la mayoría de ellos salinizados o gravemente afectados por estrés hídrico debido al servicio ininterrumpido.
Es evidente que la presión desmesurada del crecimiento de la isla ejerce efectos perniciosos sobre nuestro medio ambiente más cercano, afectando negativamente sus usos. Corresponde al Govern poner en marcha medidas para garantizar un modelo de crecimiento regenerativo, desvincular el crecimiento económico del uso de recursos y la degradación ambiental, y acelerar la transición hacia una economía circular, tal como promueve la Unión Europea en su marco básico.
El pasado 17 de octubre de 2024, recibimos la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de las Islas Baleares, Sala de lo Contencioso Administrativo, en la que no se nos reconoce como parte interesada en el estado actual de la tramitación, impidiéndonos defender legítimamente esta parte de nuestro territorio.
El pasado 15 de noviembre, durante la asamblea ordinaria anual de la Asociación de Vecinos de la Venda de Fornàs, se aprobó por unanimidad de los socios asistentes el inicio de una recogida de firmas para elevar una petición popular a nuestras autoridades políticas, solicitando que no se conceda ninguna licencia de explotación sobre los terrenos pretendidos por Can Escandell S.L. en relación a la cantera de S’Espartar.
Lo ponemos en su conocimiento con carácter general, adjuntando el primer bloque de firmas recogidas, que ascienden a 1.416″, concluyen.