El presidente del Consell Insular de Formentera, Lorenzo Córdoba, ha emitido un comunicado tras concretarse la moción de censura que le va a echar de su cargo en la institución, en el que asegura que todo este movimiento político obedece a la intención de ocultar los casos de presunta corrupción en el Consell durante los últimos años que él mismo ha denunciado.
«Es muy triste que se me quiera hacer una moción de censura para tratar de encubrir la presunta corrupción que ha habido en estos años en el Consell”, afirma textualmente. «Algo que, de todas formas, no iba a dar ningún resultado ya que la Fiscalía Anticorrupción y Contra el Crimen Organizado ya está investigando todas las irregularidades a través de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil”, insiste.
Eso significa, ha apuntado el presidente, que “más pronto o más tarde, y esté yo o no de presidente, saldrá todo a la luz y se depurarán las correspondientes responsabilidades”.
Córdoba ha recordado, asimismo, que esta moción de censura «tampoco se ajusta a las negociaciones que ha mantenido en los últimos meses con el Partido Popular balear».
“No depende de mí que se lleve a cabo o no una moción, pero sí que recibí el apoyo de la cúpula del PP balear y me garantizaron que nadie del partido iba a participar en una moción de censura contra mi persona. Imagino que si los consellers populares de Formentera van en contra de las directrices marcadas por su partido deberán atenerse a las posibles consecuencias o sanciones disciplinarias que se les pueda aplicar”, añade.
«En caso de que se les retirase la afiliación al partido, que es uno de los supuestos que se podría aplicar desde el PP balear, podría provocarse la situación de que los consellers del Partido Popular pasasen a ser no adscritos, por lo que legalmente no podrían formar parte de una junta de gobierno ni ser vicepresidentes», añade en la nota del todavía presidente.
«Tampoco podrían recibir delegaciones de funciones por parte de presidencia. De darse esta situación, sólo tres consellers (los de Compromís) serían aptos para formar junta de gobierno, no llegando a los cuatro necesarios como mínimo», subraya.
“Lo que no se puede entender de ninguna de las maneras es que la derecha le entregue el poder del Consell de Formentera a la izquierda”, ha insistido el presidente, “que es quien ha dicho quién tiene que dimitir y quién debe presidir el Consell. Por supuesto, las líneas políticas también las marcarán el PSOE y GxF”.
“La izquierda ha evitado gobernar en esta legislatura porque es consciente de las irregularidades y los marrones que dejaron en los años anteriores, pero han sabido cómo tomar el control, a través de Sa Unió, sin que parezcan ser ellos los responsables”, asevera en la nota enviada a los medios.
“Sigo preguntándome que intereses hay detrás de todos estos movimientos que no se entienden desde el punto de vista político ni del interés general de Formentera», concluye.