@D.V./ Probablemente, Ibiza sea uno de los lugares más fotografiados del planeta, sin embargo los personajes que aparecen en los retratos de Xavi Asenjo son la antítesis completa de la Ibiza de postal o del lujo y el glamour que suele aparecer en las revistas y los medios de comunicación. Asenjo prefiere retratar a los personajes habituales que encuentra deambulando en el paseo de Vara de Rey, en la plaza del Parque o en la zona de Figueretes, en Vila: unas personas a, su juicio, infinitamente más interesantes que la enésima foto a Es Vedrá.
“Me interesa muchísimo captar la expresión de la gente. Intentar extraer sus emociones, su esencia” comenta Asenjo, quien comenta que entre los habituales de este mundo se siente cómodo: “A algunos los conozco. En algunos casos les pido que posen. En otras ocasiones son fotografías robadas. A veces estoy diez minutos esperando el momento perfecto, la situación adecuada”.
El Diane Arbus de Vila
En sus instantáneas, Asenjo utiliza una Nikon 5000 y no realiza ningún truco de edición ni de filtros y, como mucho, realiza algún retoque de contrastes con el photoshop. Simplemente se dedica a pasear y a intentar captar el momento perfecto. Por su debilidad por el retrato, por la imagen naturalista y por su especial sensibilidad hacia los personajes peculiares y los marginados sociales, Xavier Asenjo podria ser una especie de Diane Arbus vilero pero, aunque conoce el fascinante trabajo de la neoyorkina, tampoco la cita como una influencia directa: “Todo se lo debo a mi amigo Orión Lafuente, que fue quien me animó a hacer fotografías”, comenta.
Muchos de sus retratos tienen su propia trastienda. Así, en una de ellas el protagonista es Juanito de sa Torre, un personaje muy peculiar: “Le conozco de toda la vida y cuando le pedí que posara me dijo lo que me dice siempre, ¿’vas calent o no’? Siempre me he preguntado si antes era sido así, cómo debía ser Juanito de joven”. Otra persona con quien tiene una conexión especial es el protagonista de ‘Yeah’, un mendigo que acostumbra a abordar a los transeúntes de una forma muy agresiva e intimidante: «Al principio lo conocía por su mala leche, como todo elmundo. Pero al tratarlo un poco más descubrí una persona completamente distinta». Cada fotografia tiene una historia de la misma manera que cada personaje tiene la suya. Asenjo, como todos los autodidactas, no tiene ninguna metodología de trabajo ni tampoco le gusta teorizar demasiado sobre fotografía: simplemente le gusta pasear con su cámara y retratar aquello que despierta su sensibilidad. Lo que hay es lo que se ve, y punto.
Hasta el momento, Asenjo ha expuesto sus instantáneas en el Café de Kafka de la Marina y en el Nine -en este caso conjuntamente con Orión Lafuente-, actualmente está realizando un curso de pintura y su prioridad, a día de hoy, es encontrar trabajo. A pesar de todo, su idea es continuar haciendo fotos. Una amplia muestra de su trabajo se puede disfrutar en su página de Flickr, donde se encuentran fotografías realizadas también en Barcelona, Valencia y Marsella.
Molt bones fotos
me gustan xavi 🙂