Por D.V: Se intuía, se sospechaba, se comentaba, pero finalmente las conjeturas se han convertido en una confirmación rotunda: la residencia de Sant Antoni no abrirá en el 2013. El presidente del Consell Insular de Eivissa, Vicent Serra ha expresado que lamenta esta situación pero que el Consell debe “ser serio” y actuar en consecuencia con su situación económica: “no hay solvencia para mantener esta instalación. Debemos ser serios: si no se puede dar un buen servicio, mejor no darlo”.
Serra ha hecho estas declaraciones en los micrófonos de la cadena SER, en una larga entrevista en la que, principalmente, se ha centrado en defender su gestión y a aplazar cualquier reivindicación o proyecto a un futuro en el que la situación económica sea un poco mejor, negándose a esgrimir ningún calendario más preciso.
Así, preguntado por la deuda que el Govern mantiene con el Consell, Serra se ha excusado en que la situación económica del ejecutivo balear es “complicadísima” y que, dadas las circunstancias actuales, es imposible exigir nada al Govern: “Cuando salgamos de la crisis, ya pediremos lo que nos corresponde”. Un plazo laxo ya que incluso el Gobierno central advierte que los primeros signos de recuperación económica no llegarán hasta el 2014, y esas serían las previsiones más optimistas.
Relación cordial con Bauzá
Serra ha negado cualquier tipo de sumisión del PP de Eivissa respecto a las directrices de Jose Ramón Bauzá o del PP Balear, y ha afirmado que los diputados ibicencos “son reivindicativos, lo que pasa es que sus actuaciones no aparecen en los medios de comunicación”. Como ejemplo a su política reivindicativa ha citado el hecho de Eivissa haya asistido a la última World Travel Market con un stand propio, distinto del de Balears.
El presidente del Consell, que también lo es del Partido Popular en Eivissa, ha negado que Bauzá esté en deuda con ellos por haber impedido que Pere Palau fuera el presidente del Parlament. Serra se ha remitido al discurso de que “lo importante es trabajar para resolver la complicada situación económica” y ha orillado cualquier tipo de disputa o rencilla interna.
Serra, además, ha insistido nuevamente en la necesidad de que el Gobierno central regule las conexiones aéreas entre las islas y la península, y ha afirmado que “donde no llega el mercado, el Estado tiene que intervenir para solventar situaciones injustas”.
Preguntado sobre cuál es su principal deseo para el 2013, el presidente del Consell ha dicho que desea “salud para todos”. Una respuesta razonable y con la que, seguramente, todo el mundo estará de acuerdo.