El fuego, que se ha iniciado sobre las 11 de la mañana en la finca de can Pep Benisait, en Cala Boix, ha podido ser extinguido después de quemar una extensión de 100 metros cuadrados. El incendio fue detectado inmediatamente por los vecinos, que dieron la voz de alarma y ayudaron a intentar controlar los primeros instantes del fuego. Al lugar del incendio se han desplazado dos camiones de bomberos, miembros de la Policía Local de Santa Eulària, Guardia Civil y agentes de Medio Ambiente del Covern balear. Poco después, el fuego ha sido dado por extinguido.
Según los agentes de Medio Ambiente, el fuego ha sido provocado. El incendio se ha iniciado en un lugar del bosque donde se depositan escombros y, dadas las actuales condiciones de humedad, se descarta que se haya producido de manera fortuita.
La rápida intervención de los vecinos ha evitado que el fuego se propagara y el incendio aquiriera mayores proporciones. Los cubos de agua arrojados sobre las llamas por los vecinos de la zona han evitado en primera instancia que el fuego alcanzara los árboles y básicamente sólo han ardido matorrales. Si llega a pasar en verano, comentaba un responsable de Medio Ambiente del Govern, hubiera podido ser mucho peor. Suele pasar, según las mismas fuentes, que ardan zonas en las que se depositan residuos y en estos casos el fuego es provocado por algún vecino molesto con este hecho.