@Noudiari / Un nutrido grupo de pilotos del Motoclub de Formentera i Eivissa ha tomado parte este pasado fin de semana en la prueba de enduro con mayor participación de cuantas se disputan en Europa, la Bassella Race, en la que el piltoto de la entidad insular Christian Ardevol obtuvo una más que meritoria tercera plaza en la categoría senior. Pese a verse afectado por un caída multitudinaria que frenó su marcha, Ardevol supo retomar el ritmo de los mejores en una escalada de mérito que le condujo al tercer puesto del cajón.
No fue el único de los pilotos de la expedición pitiusa que brilló en Lleida, puesto que Dani Torres, por su parte, se hizo con la decimoséptima plaza de la categoría para motos clásicas, en la que compitió con excampeones del Mundo, como Iván Cervantes, y otros pilotos con renombre internacional.
Por otro lado, Juan Carlos Marí consiguió finalizar las dos vueltas al circuito en vigesoquinta posición del grupo júnior. Peor suerte corrió el también ibicenco Toni Bonet en la misma división, a quien una caída en la segunda vuelta le impidió finalizar la prueba cuando estaba rodando entre los primeros 20 puestos.
Del resto de pilotos ibicencos en categoria senior cabe destacar, asimismo, la vigesimatercera posición obtenida por Javi Palau y la trigesimoprimera de Adrià Costa, quienes también se vieron perjudicados por el tapón inicial de la carrera. Más retrasados llegaron Alejandro Escandell (90) y Antonio Juan Riera(106). Una avería cerca de meta impidió que Agustín Ribas pudiera cruzar la línea de llegada cuando se movía entre los 80 mejores puestos, lo que mismo que sufrieron Dani Torres y Eduardo de Bea.
Por último, en la categoría de amigos, Victor Lozano logró finalizar en una muy meritoria vigesimoprimera posición. El otro piloto ibicenco en este grupo, Joaquín Marí, no pudo tomar la salida por problemas mecánicos.
La intensa lluvía caída sobre el terreno obligó a los organizadores a modificar el trazado, eliminando las zonas más afectadas por el barro, con lo que el recorrido fue menor de lo inicialmente esperado pero, a la vez, mucho más duro de lo previsto a causa del estado en el que quedo el circuito por las inclemencias meteorológicas.