@Noudiari / La oficina central de Correos en Eivissa lleva unos días patas arriba por la avería de la máquina dispensadora de turnos (paquetería, envíos, etc). Esto provoca algunos contratiempos, sobre todo en un sitio con tanta asistencia de público, tal y como señalan algunos usuarios.
«Hay que pedir el turno a viva voz, como si estuviéramos en un puesto del mercado», afirma uno de las personas que están esperando para enviar un paquete. «Muchos, al ver colas tan grandes, salen a fumar un cigarrillo, a hacer un recado o a poner el tícket de la zona azul y, claro, pierden el turno. Después vienen las discusiones», añade una señora.
La citada máquina, tal y como aparece en la imagen, aparece tapada con un folio y con el ruego de que se pida turno. El problema persiste desde hace más de una semana y este viernes aún no estaba resuelto, aunque se hace más llevadero por el buen servicio que realizan los trabajadores de la empresa postal, que hacen todo lo posible para agilizar los trámites.
La cuestión tiene todavía más miga y es que, según una funcionaria de Correos, «es ya la tercera vez que la máquina dispensadora se estropea en un corto espacio de tiempo». Para arreglarlo, según la misma fuente, tiene que venir un técnico desde Mallorca y, para colmo, la reparación está siempre pendiente de que se autorice, vía presupuesto, desde la dirección provincial, con el consiguiente retraso en la solución de la deficiencia.