Fútbol Pitiuso / La derrota (2-1) en el terreno de juego del Atlético Villacarlos la pasada jornada ha acabado con la paciencia de una Peña Deportiva que ha decidido dar un golpe de timón cesando al entrenador del equipo de Liga Nacional juvenil, Juan San Vicente. Los responsables deportivos del club entienden que el plantel necesita reaccionar de manera urgente para lograr salvar la categoría y le han dado a Raúl Casañ la responsabilidad de lograr el objetivo fijado a principios de temporada.
Tras una primera vuelta brillante, donde la formación peñista logró siete victorias, 5 empates y otras tantas derrotas, una mala racha de resultados tiene sumido en una depresión a un grupo que ocupa el decimotercero puesto de la tabla con 34 puntos, a tan sólo cuatro del descenso directo. La Peña Deportiva, en los últimos siete partidos, ha perdido en cinco ocasiones y tan sólo ha sumado dos dígitos, fruto de los empates ante el Campos (1-1) y frente al Cide (0-0).
Además, la faceta goleadora del equipo está muy lejos de los registros de principios de temporada. No en vano, únicamente tres goles es el registro en las siete últimias jornadas de una plantilla que cuenta con jugadores de calidad contrastada en la delantera, como son los casos de Agus, Juli o Samu. La Peña Deportiva ha entrado en una dinámica muy peligrosa y el club no está dispuesto a perder la categoría, por lo que quiere provocar un cambio dejando la dirección el vestuario a un hombre de fútbol, como es Raúl Casañ.
«Estoy jodido»
Juan San Vicente acepta su destitución, pero asegura que estaba totalmente capacitado para sacar del atolladero al bloque peñista. “Estoy jodido porque un cese no gusta a ningún entrenador, pero entiendo que en fútbol mandan los resultados y, a diferencia de la primera vuelta, éstos han sido muy malos. Me voy resignado porque estoy seguro que podía haber levantado el vuelo y salvar la categoría”, explica el preparador, que, preguntado por las causas del pobre bagaje de resultados del grupo, responde: “Hemos tenido muy mala suerte en los últimos partidos. Los chavales se lo han currado y han mostrado mucha implicación, pero no hemos estado afortunados de cara a puerta”.
El míster, no obstante, desea toda la suerte del mundo al equipo en lo que queda de Liga y sostiene que la Peña logrará la salvación. “No me cabe ninguna duda. Este grupo de chavales es la caña y logrará el objetivo porque tiene calidad suficiente para ello. Espero y deseo que Raúl Casañ logre enderezar el rumbo y desde aquí le deseo todo el éxito que no he tenido yo últimamente”, indica un Juan San Vicente que lo ha dado todo por la Peña desde que se hiciera cargo del grupo. “Subí al equipo a Liga Nacional y la temporada pasada nos salvamos con muchas dificultades. Me he dejado el alma por este proyecto y también me ha costado dinero”, resalta.
Falta de implicación
Juan San Vicente, que ha echado de menos más implicación en el proyecto por parte de la directiva, sí quiso agradecer el apoyo incondicional que ha tenido de su cuerpo técnico, que también ha sido cesado. Así, Roberto Robles, Tibu y Ángel Portillo abandonan, muy a su pesar, el barco peñista.
“Son unos cracks y me han demostrado qué son grandes personas. Se han volcado con el equipo desde el primer día y siempre recordaré esta etapa junto a gente leal y auténtica”, mantiene un técnico que tenía pensado dejar el equipo a final de temporada. “Era mi intención, pero al final ha tenido que ser antes. De todas maneras, si mi cese sirve para que el equipo se salve estaré contento”, concluye.
“Le echaremos de menos”
El capitán de la Peña Deportiva, el portero Paquito, se mostró fastidiado cuando se enteró que Juan San Vicente dejaba de ser el entrenador del equipo. Explica el futbolista que la noticia sentó en el vestuario como un jarro de agua fría porque “el míster se lo ha currado mucho y no creemos que tenga la culpa de la mala racha de resultados del equipo”. “En la primera vuelta, cuando todo iba bien y se ganaba, nadie dudó de su trabajo”, añade el arquero, que también asegura: “Le echaremos de menos”.
No obstante, Paquito tiene muy claro que la suerte tiene que cambiar en algún momento y confía plenamente en que el equipo salvará la categoría. “Estamos convencidos de que así será. Lo único que está fallando es que no estamos haciendo gol y esperamos que ante la Penya Arrabal, la próxima jornada, podamos truncar esta mala dinámica y conseguir una victoria que nos dé seguridad y algo de moral”, comenta un Paquito que muestra todo su apoyo a Raúl Casañ. “Entre todos debemos tirar del carro y morir en el campo. El nuevo entrenador tiene toda nuestra confianza”, finaliza.
Pere Seguí: “Buscamos un revulsivo”
Uno de los responsables del fútbol base de la Peña Deportiva, Pere Seguí, sostiene que Juan San Vicente ha sido cesado porque los resultados del equipo no eran buenos y el descenso estaba muy cerca. El coordinador del club, además, apunta que con la destitución del míster “buscamos un revulsivo”. En este sentido, sostiene que “la dinámica era muy peligrosa y creemos que cambiando de entrenador el equipo puede reaccionar”. “Al menos, vamos a intentarlo, ya que sólo quedan siete partidos para acabar, siete partidos que serán siete finales”, prosigue.
Pere Seguí valora el trabajo desempeñado por Juan San Vicente, pero aclara: “Estábamos obligados a buscar una solución porque la trayectoria del grupo era muy peligrosa. Nos sabe muy mal prescindir del míster, porque es un hombre de club y lo ha demostrado con creces, pero a veces hay que tomar este tipo de decisiones que no suelen gustar”. El coordinador confía en el equipo y no duda que echará el resto para salvar la categoría. “El grupo va a pelear hasta el final y seguro que lograremos la permanencia”, concluye.