@D.V./ La obras de construcción del nuevo supermercado Mercadona que se ubicará en s’Olivera avanzan a todo ritmo, y ya se puede comprobar in situ qué parte del yacimiento arqueológico será finalmente museizado. Recordemos que la Ponencia Técnica de Técnica de la Comisión Insular de Ordenación del Territorio y Patrimonio Historicoartístico (CIOTUPHA) recomendó museizar una superficie total de 1.800 metros cuadrados, mientras que en el resto del solar -8.200 metros cuadrados, aproximadamente- el yacimiento se ha cubierto y ya se alzan las primeras vigas de la estructura del supermercado.
En comparación con el paisaje de hace dos meses, el solar ha cambiado de aspecto radicalmente. Donde hasta hace pocas semanas se extendían las antiguas zanjas de cultivo de la época romana, ahora encontramos una superficie completamente allanada y cubierta. Los obreros están trabajando ahora en la construcción de un muro de hormigón que separará el yacimiento que se conservará in situ con el resto del solar, de manera que los restos arqueológicos y el supermercado estarán pared con pared pero segregados. También se ha clavado una estructura sobre los restos arqueológicos, dentro del plan de museización.
El proyecto que presentó la CIOTUPHA contemplaba separar el área que ocupará el museo del yacimiento, y unir éste con el solar municipal en el que se encuentra el molino de s’Olivera para integrarlo en el proyecto de museización. Recordemos que en el espacio que 1.800 metros cuadrados que se podrá visitar se encontraros restos de una necrópolis, de una casa de época romana y de otra vivienda de la época islámica, silos, pozos para recoger el aceite y un conjunto de zanjas de cultivo, entre otros restos de diferentes épocas históricas.
El hallazgo de estos restos provocó la petición de diversos grupos políticos, culturales y ecologistas para que se conservaran y pudieran ser visitados y disfrutados por la ciudadanía. El solar es propiedad de Mercadona pero se llegó a un acuerdo económico con el Consell para que éste se quedara la parte que los técnicos de la institución consideraban que contenía los restos arqueológicos más relevantes.
La conservación in situ de los restos arqueológicos es algo absolutamente excepcional en Eivissa. Recordemos, por ejemplo, el hallazgo de una espectacular necrópolis islámica durante las obras de ampliación de la carretera del aeropuerto, que después de la documentación y la clasificación de las piezas encontradas, fue sepultada por el asfalto.