@Noudiari / «Ésta es la película que yo había soñado. La primera versión fue la que podía hacer», aseguró el director formenterense Alfredo Montero durante la rueda de prensa de presentación de La Cueva. La cinta llega al 03 Maremostra – Palma International Film Festival en una versión renovada después de que Morena Films entrara en la producción.
El film, rodado en la cueva de San Valero –una gruta de 1.200 metros- en Formentera, relata el viaje que un grupo de amigos realizará a la isla durante unas vacaciones. «A los 15 minutos termina la película de humor y aventuras, la luz y el paraíso, y arranca la de terror», explicaba Montero, ya que los jóvenes se perderán en el interior de esta caverna.
El director destacó la dificultad del rodaje, ya que el gran número de galerías estrechas no permitía filmar con un equipo convencional de cine. En este sentido, señaló que es una película «muy realista», en la línea de producciones como Rec o El proyecto de la Bruja de Blair. «Pero se diferencia de éstas en que es una historia que podría pasar», matizó. «Somos la única película de terror en la que el maquillaje sirvió para disimular la sangre real», comentó la actriz Eva García.
Durante la presentación, que contó con la presencia del director de programación de Maremostra, Álvaro Iglesias, Alfredo Montero anunció que ya se han vendido los derechos de la película para que se realice un remake en Estados Unidos. Una versión que se rodará en estudio y no en un escenario real y que ya está en fase de preproducción. «Eso hace que se valore más tu nombre fuera de España. La marca de terror español tiene un valor brutal fuera de aquí», reconoció.
La primera versión de La Cueva se estrenó en el Festival de Sitges de 2012, cuando el productor Juan Gordon de Morena Films se interesó por la cinta, pidiendo que se mejorara. Una tarea que supuso un nuevo rodaje, la eliminación de algunas escenas redundantes y la incorporación de gran cantidad de material nuevo. «La película en esencia es la misma, pero toda la historia pasa más rápida, más intensa y los personajes están más definidos», señaló.
El cineasta formenterense confesó que había sido un «ejercicio duro» no por el ego sino «por la dureza de repetir el rodaje». «Tenía que volver a pasar 12 horas dentro de una cueva. Físicamente era muy duro, pero moralmente muy estimulante», confesó. Montero anunció también que la cinta llegará a las salas el próximo 11 de julio.