Durante estos días, los claustros de los centros educativos de nuestras islas, han sido convocados para la aprobación o no, del correspondiente proyecto TIL.
La primera votación ha concluido con un apabullante goleada si utilizamos el argot futbolístico que nos va a acompañar durante semanas. El no ha sido abrumador (más de 100 centros según la Assemblea de Docents en todas las Baleares). La gran mayoría de los claustros han confirmado el despropósito de la imposición por parte de la Conselleria de su “maravilloso” Tratamiento Integral de Lenguas, o sea, el TIL, que hemos tenido hasta en la sopa. El curso, a punto de acabar, ha provocado la rebelión, como era de esperar por parte de los profesionales de la educación. ¿Qué dirán ahora? ¿Quién tiene la mayoría? No podemos estar tantos equivocados.
Seguiremos diciendo no a ello, pero lo que no sabe la mayoría de las familias y la ciudadanía, es que la consellera Camps y su equipo, ha diseñado un proceso que contiene una fatal trampa para los docentes. Dicha trampa es un “bucle” cuya única opción que prevé la Conselleria es que se apruebe sí o sí. ¿Cuántas veces tendremos que reunirnos los claustros para que el resultado se ajuste a sus expectativas? Ni lo sabemos nosotros, ni los inspectores, pero ellos cuentan con que cederemos y el cansancio nos podrá.
Hemos denunciado públicamente la manipulación, la mentira, las coacciones, etc en algunos claustros ante las primeras votaciones. Seguirá la presión y las convocatorias para someter, tras un intento de consenso, su aprobación.
El año pasado, los equipos directivos tuvieron que trabajar en el mes de julio en el diseño de dicho proyecto, con el rompederos de cabeza que supuso. Además empezado el mes de septiembre, algunos centros se encontraron con que no estaban aprobados por el Consejo Escolar, algunos tuvieron que ser modificados a pocos días de empezar el curso, etc.
Una pesadilla que se hace presente de nuevo para todos los docentes. Después de un año de lucha y saber la barbaridad que supone la aplicación de esta imposición, nos negamos a ceder a las exigencias de nuestra consellera.
El Govern no ha movido ficha en este proceso de búsqueda de acuerdo en las exigencias que se recogieron en el listado de demandas presentado por la Assemblea de Docents al principio de curso. Camps se ha enrocado y no hay forma de desatascar el conflicto. ¿Se acuerda de las 10 demandas que planteamos o solo se le atragantado el TIL?
Desde estas líneas hago una llamamiento a mis compañeras y compañeros de profesión, a que sigan votando NO AL TIL, tantas veces como sea necesario. Si cedemos, la única lectura que hará por parte del PP es que hemos aprobado el TIL y que nos han vencido. Debemos resistir en este final de curso.
Además, el año que viene tendremos la aplicación, por imposición, de la LOMCE. Un curso que se presenta con unas elecciones municipales y autonómicas en 2015, que harán que las barbaridades, las imposiciones, las mentiras y la demagogia utilizadas por el Govern Balear, puedan ser tumbadas por la “mayoría silenciosa” que ellos tanto alardean y que decidirá si su política educativa es acorde con lo que necesita la sociedad balear.
Salvador Aguilera