@D.V./ Plácidas excursiones matutinas para descubrir el litoral ibicenco o fiestas con alcohol y música electrónica para empezar una larga jornada de fiesta. El Passion Cat se alquilaba tanto para excursiones de mañana a 1.920 euros como para fiestas de más de 10 horas coincidiendo con la puesta de sol y con servicio de bar y disc-jockey. Este catamarán fue construído en el año 2006 pero desde el 2011 funcionaba como barco para ‘excursiones marítimas’, o al menos así consta en el registro del Govern balear. Aunque hay que avisar que bajo la etiqueta de ‘excursiones marítimas’ se incluyen las party-boats, aunque este concepto no existe en la Ley balear del Transporte Marítimo del año 2010.
En sus tres años de funcionamiento, el Passion Cat ha sido uno más de la decenas de embarcaciones que, durante los meses de verano, se convierten en pequeñas discotecas sobre el mar. Durante tres años ha funcionado en completa normalidad y sin incidencias reseñables. Durante este tiempo, además, ha acogido fiestas muy distintas. Así, durante el año 2012 fue el hogar del Marco Loco Boat Party, una de las fiestas acuáticas más existosas de ese verano y que tenía como protagonista al disc-jockey de música house Marco Loco, conocido principalmente por sus residencias en la discoteca Space.
De esta fiestasque convertían el catamarán en una discoteca flotante y que era un aperitivo para la fiesta de las discotecas, nos quedan algunos videos que se han colgado en youtube y que nos sirven para saber exactamente qué era una boat party en el Passion Cat.
Una party-boat ‘cool’
En verano de 2013, en cambio, el catamarán fue el epicentro del BalearicBliss Boat Party, de la marca Smartie Partie -con gran experiencia en fiestas de este tipo- y organizada por Trace Harris, quien en una entrevista definía estas fiestas como ‘elegantes y cool’ -”the ultimate cool boat party”- y que apostaba por una clientela muy específica y la contraponía a la masificación de otras party boats: “If they’re cool they’re on board. With respect to many of the other boat parties, this is different, it’s an international party”.
No obstante el video promocional que podemos encontrar en youtube nos mostraba una party boat que se ajustaba a las convenciones al uso.
Un buen barco, con magníficas posibilidades para ser el vehículo ideal para una excursión con la que disfrutar del mar, la música y de la puesta de sol. O también una caótica discoteca flotante donde reina el descontrol absoluto. Todo depende de la famosa autorregulación y de las buenas prácticas. Y también de la voluntad de hacerlas cumplir y de la capacidad sancionadora, evidentemente.
No esto no es una fiesta, es una excursión marítima… jajajja. Qué verguenza que dejen hacer esto con un permiso de excursion. esto son discotecas flotantes y el que diga lo contrario es que no quiere aceptar la realidad pura y dura de las cosas.
¿Cuantos turistas han muerto en las discos super masificadas?
No he oído a ningún político, policía, funcionario responsable decir:
¡Hay que cerrar las discotecas!
Pues nada, que pase el siguiente.