Por D.V: La presión que están desarrollando durante las últimas semanas los empresarios del sector del alquiler de coches está empezando a surgir efecto y el Govern ya ha movido ficha para intentar llegar a un punto de entendimiento. En Mallorca, el director general de Presupuestos, Antoni Costa, ha sugerido que el Govern se está planteando rebajar el tipo impositivo previsto a las empresas que tengan flotas de menor volumen; mientras, los dos principales representantes de los empresarios del sector en las Pitiüses han confirmado que se han entablado negociaciones con el Govern y que éstas siguen abiertas.
Así, la representante en las Pitiüses de la Agrupación Empresarial de Alquiler de Vehículos (Aevab), Sonia Ribas, ha confirmado que el Govern ha propuesto revisar la propuesta inicial de grabar cada vehículo entre 3’5 y 9 euros por día según su capacidad contaminante. Ribas ha recordado que la propuesta de los empresarios es “que se retire el impuesto, no que se rebaje” aunque se muestra optimista por el hecho de que se hayan acercado posturas.
Por su parte, el presidente de la asociación de rent a car de la Pimeef, Juan Cárdenas, ha coincidido en manifestar que el objetivo de los empresarios no es que se rebajen los tramos de la autotasa sino que “se revoque”. No obstante, también ha coincidido en señalar que el hecho de que las negociaciones estén abiertas “es positivo” ya que, hasta hace muy poco, el Govern se había manifestado inflexible.
Un impuesto polémico
Pese a que el viernes pasado, tras la manifestación de empresarios de rent a car en Palma, el portavoz del Govern, Rafael Bosch, aseguró que la autotasa “no tiene marcha atrás”, lo cierto es que el ejecutivo balear está reconsiderando su posición. Así, se estaría intentando encontrar una fórmula para que los pequeños empresarios no se sientan discriminados ante las grandes empresas multinacionales del sector.
Recordemos que una de las principales quejas de la patronal es que la autotasa no afecta por igual a los pequeños empresarios que a las grandes empresas que están registradas fiscalmente en municipios de la Península. Por ese motivo, muchos de ellos anunciaron que también trasladaban su domicilio fiscal fuera de las Balears.
La autotasa provocó un rechazo inmediato en los empresarios del sector desde el mismo día de su anuncio. El Govern ha argumentado que la situación de las cuentas baleares -con una deuda bancaria que alcanza los 800 millones de euros- obliga a tomar medidas de este tipo.