José Manuel Piña Vives / Josefa Escandell Bonet, conocida dramaturga ibicenca, será la única de los tres premiados con la Medalla de de Oro de la ciudad por el Ayuntamiento de Eivissa que no podrá recibir personalmente su galardón, como sí harán el empresario y exministro Abel Matutes y los actuales propietarios de la fonda Can Costa, José María y Joan. La maestra, profesora de música y escritora falleció el pasado mes de enero a los 88 años de edad. Conocida también con el sobrenombre de Pepita ‘Raios’, Pepita Escandell demostró a muy tierna edad su vocación por la escena, aunque tardó aún muchos años en desarrollar su talento para la comedia costumbrista.
Esa facilidad para crear diálogos y situaciones cargadas de humor entre la Eivissa urbana y la rural es una de las razones por las que se le concede a título póstumo este galardón. Había nacido en Vila en 1920, una fecha que ella ocultó siempre con coquetería. «Jo vaig néixer l’any 19-tirurit», respondía a quien se interesaba por su edad. Detestaba asimismo su apodo familiar y jamás atendió a quien la llamaba por él. Inició sus estudios en el colegio de la Consolsción. Allí se interesó ya por el teatro como actriz junto a un grupo de amigas de su clase. A pesar de ello, sus vida profesional iba a seguir por otros derroteros. Amante también de la música, estudió también piano con Victorino Planells, primer director de la banda municipal de música y tío de Victorí Planells, miembro de Uc, al tiempo que formaba parte de la coral Santa Cecilia.
Completó sus estudios musicales como alumna del Conservatorio Superior de Música del Liceo de Barcelona y coincidió allí con la después famosa soprano Montserrat Caballé, hecho que la llenaba de orgullo. Mujer culturalmente inquieta, cursó estudios de Magisterio en Alicante. Terminó esta carrera en 1963 y desde entonces y hasta su jubilación desarrolló esta profesión en diferentes centros de la isla y en un pueblo catalán. Fue precisamente al jubilarse cuando se especializó en dramaturgia local, poniendo en escena sus primeras obras junto al grupo de teatro de la sociedad Ebusus y del Casino des Moll.
‘Ses Frasquites’, ‘Pagessos i senyors’, ‘S’oli de ratolí’ y ‘Es bons costums’ son algunas de sus piezas más conocidas, publicadas conjuntamente por la editorial Mediterrànea y el Consell Insular ibicenco. Sin embargo, algunas de sus creaciones permanecen aún inéditas, como ‘Un senyor molt senyor’ (inacabada), ‘Carai, Toni’ y ‘Una de gatera’.
Utilizó siempre el ibicenco coloquial en sus producciones, en las que abundaban los enredos, las confusiones y los dobles significados en un ambiente de buen humor y risa continua, artes que dominaba incluso en su vida cotidiana. Grupos teatrales como el GAT de Merche Chapí y formaciones escénicas escolares como l’Urgell de Sant Josep y el Quartó de Portmany, entre otros, representaron sus obras en distintos escenarios locales.
Pepita Escandell fue hermana del historiador y catederático Bartolomé Escandell Bonet. Él falleció en Eivissa tras visitarla en la residencia de Can Vilàs. Murió pocos meses antes que ella. La escritora dejó tras su muerte un gran vacío en el mundo cultural pitiuso, que nadie ha intentado siquiera ocupar todavía.