@Miguel Vidal / El estreno liguero 2014-2015 ha tenido dos hechos relevantes. Uno ha sido el debut histórico de la Sociedad Deportiva Eibar, que encarna los valores eternos del fútbol vasco. Otro, las pobrísimas entradas registradas en todos y cada uno de los partidos de Segunda División, un mal que ya viene siendo endémico.
El Eibar estrenó categoría, estrenó “derby” y lo hizo con victoria frente a su vecino guipúzcoano Real Sociedad. Un solitario gol de Javi Lara, fichado de la Ponferradina, bastó para firmar una hazaña que a mí personalmente me reconcilia con la esencia noble del fútbol, y en especial del fútbol vasco, auténtico, recio, viril, entregado y eficaz. Aquél fútbol que en la irrupción internacional de España en la Olimpiada de Amberes en 1920 la selección la conformaban en su mayoría jugadores vascos “porque eran altos, fuertes y recios de carácter” según palabras del entonces seleccionador Francisco Bru.
Fundado en 1940 de la fusión del Deportivo Gallo y la Unión Deportiva Eibar, estando en 1943 en categoría regional y con muy pocos medios económicos a su alcance (como hoy) la Federación Guipúzcoana de Fútbol les hizo llegar una equipación completa donada por el FC Barcelona, de ahí que la SD Eibar vista de azulgrana. En colores es el Barcelona chico, aunque en administración esté en las Antípodas del representante de la Ciudad Condal. Basta pensar que en el Camp Nou, uno de los mayores coliseos futbolísticos del mundo, caben veinte estadios como el de Ipurúa. O que el presupuesto del FC Barcelona es cien veces superior.
En lo que no le gana el Barcelona al Eibar, ni ningún otro equipo, es en voluntad y entrega. O mucho me equivoco pero tengo el presentimiento que serán los grandes animadores de ésta Liga, en especial en la caja de cerillas que tienen como campo de fútbol al pie de la autopista que une San Sebastián con Bilbao y frente a los grandes. Como se dice en nuestra lengua “en pegaran un fum”.
Pero mientras eso llega pido un aplauso anticipado a un Eibar que el 30 de junio de 2013 ascendió a Segunda División “A” y que con un presupuesto de tan sólo cinco millones de euros un año después lo hizo a Primera División. Todo un balón de oxígeno para los equipos modestos y un toque de atención a aquellos que todo lo fían al gasto desproporcionado e intolerable en fichajes, el derroche y la mala cabeza en suma, y que ahora se ven abocados al concurso de acreedores o a las deudas que no pueden pagar con Hacienda. ¿O es que alguien me quiere hacer creer que el único equipo que no puede pagar sus deudas con el Fisco es el Murcia?.
Buen artículo de un periodista fraguado en mil batallas y al que vengo siguiendo desde sus tiempos del Diario AS.
Una crónica perfecta en cuento a nuestro equipo, aunque falta explicar que a pesar de todo lo dicho por el autor, la S.D.Eibar a tenido que recaudar entre sus socios y simpatizantes, mas de 1.700.000€ a lo que le obligaba la Liga Profesional, so pena de hacerle descender a Segunda B, siendo, seguramente, el único equipo español, tanto en primera como en segunda división, con las cuentas totaensane saneadas….
También decir que a dia de hoy, la S.D.Eibar, es el único equipo de Europa con el certificado de Calidad UNE-EN-ISO 9001/2….AUPA EIBAR !!!!!